El ex secretario general de la sección sindical de UGT-Ford Gonzalo Pino Bustos, en la actualidad responsable de Acción Sindical de la comisión ejecutiva de la central que dirige Conrado Hernández desde el último congreso general de UGT-PV, se ha ido de la factoría del automóvil pero deja colocados a varios familiares directos en la planta valenciana.

En estos últimos ejercicios, este veterano mandatario sindical ha logrado que la multinacional del sector de la automoción con fábrica en Almussafes -que en la actualidad emplea a 6.750 personas- contrate en la categoría profesional de "especialistas" a dos hermanas: Rosario y Yolanda Pino Bustos, que cuentan con contrato laboral en vigor desde marzo de 2008 y enero de 2004, respectivamente. Los lazos familiares en la plantilla del otrora líder de UGT en Ford Almussafes también llegan a dos hijos: Israel Pino Giménez y David Pino Giménez, que entraron con "contratos de relevo" -tras la aplicaciones de diversos programas de jubilaciones anticipadas del personal de la fábrica- en septiembre de 2008 y junio de 2003, respectivamente. Han recorrido diversas ocupaciones en instalaciones de motores y carrocerías, entre otros puestos. Además, han pasado a contratos indefinidos sin ningún problema, según fuentes sindicales.

Afiliación a UGT

La afiliación a UGT, según aseguran desde el comité de empresa, "viene siendo tónica habitual entre los trabajadores nuevos que se incorporan a la fábrica". El órgano de representación del personal de Ford Almussafes cuenta con veinte representantes de la central ugetista, lo que supone la mayoría absoluta, frente a Comisiones Obreras, CGT y STM, que mantienen un abierto enfrentamiento con UGT sobre la estrategia sindical en las negociaciones con la dirección de la compañía. Estas mismas fuentes aseguran que la empresa "obliga" a los trabajadores a coger el carnet de UGT para ascender de categoría o conseguir un contrato de trabajo".

"Este dirigente sindical deja tras de sí dos mil puestos de trabajo suprimidos, la reducción de las vacaciones de verano en una semana, la movilidad más absoluta, los más altos ritmos de trabajo de todas la historia de Ford, la pérdida de derechos para los eventuales y la puerta abierta para la eliminación del servicio de comedores", lamenta la sección sindical de CGT-PV en Ford.

Quince años de dirigente

Durante los últimos 24 años Gonzalo ha permanecido en tareas sindicales dentro de la factoría. Pino llegó a la fábrica en 1976 y en 1980 se afilió a UGT tras pasar una temporada en Comisiones Obreras.

En 1985 fue elegido secretario general de esta central en la planta de Almussafes y en la siguiente década se convirtió en el principal interlocutor de la empresa en los procesos de negociación colectiva y de planes de futuro.