Lo que parecía una inversión segura para toda la vida ha salido muy caro a miles de clientes de las entidades financieras intervenidas por el Estado. Inversores en participaciones preferentes y emisiones de deuda subordinada apostaron al mito de que un banco nueva quiebra para obtener altas rentabilidades aún a costa de meter su dinero en producto híbridos de escasa liquidez muy dependientes del mercado secundario.

La intervención de Bankia, Banco de Valencia, CAM, Novacaixa Galicia y Catalunya Caixa reveló pérdidas multimillonarias que a la vez llevaron a la suspensión del abono de los intereses de preferentes y subordinadas, uno de los riesgos inherentes a los propios productos. Antes de que la troika tomase el bastón de mando de la reestructuración financiera el año pasado, la CAM pasó a manos del Banco de Sabadell, que ejecutó su propia receta para resolver el problema. Tras absorber los restos de la caja alicantina ofreció a los inversores un canje por acciones que en la práctica suponía una quita de aproximadamente el 30 % sobre el principal invertido. El precio del canje se fijó en 2,3 euros por título; hoy cotizan a 1,70, por lo que a la larga la pérdida ha sido mayor de lo inicialmente pactado. No obstante, el 95,6 % de los inversores decidieron aceptar la oferta.

La diferencia respecto a los canjes propuestos por el resto de entidades intervenidas es que el Sabadell ofreció a sus nuevos accionista un bono con un interés del 6 % anual sobre el valor de sus títulos si no se desprendían de estos en cuatro años. O lo que es lo mismo: una rentabilidad del 24 % acumulada en cuatro ejercicios, que se abona de forma trimestral. Fuentes el banco que preside Josep Oliu señalan que hay un alto porcentaje de permanencia, es decir, de clientes que han decidido aguantar cuatro años sus acciones.

En el lado opuesto al de la CAM se sitúa el Banco de Valencia. La troika (BCE, FMI, Comisión Europea) ha impuesto como condición para liberar los fondos de rescate a la banca española que accionistas e inversores en preferentes y subordinadas asuman una parte importante de las pérdidas de las entidades nacionalizadas. Tanto es así que la quita que el FROB ha aplicado en el Banco de Valencia (donde ha inyectado ya 5.500 millones de euros) ha sido del 85 % para las preferentes y del 90 % para los productos de deuda subordinada. Esto ha provocado cuantiosas pérdidas en el mercado institucional o mayorista. Varios fondos y sociedades de inversión en capital variable (Sicav) han comunicado a la CNMV pérdidas como consecuencia de esa quita. Los inversores minoristas tendrán que esperar a 2014 para conocer el futuro de su dinero.

Las otros tres bancos nacionalizados, Bankia, Novacaixa Galicia y Catalunya Caixa, aún no han recibido luz verde para sus planes de canje, pero aplicarán también importantes quitas. Bankia ha propuesto canjes por acciones con descuentos del 39 % para las preferentes y de entre el 46 % y el 14 % para la deuda subordinada, dependiendo de si es perpetua, de su fecha de vencimiento o de la de emisión. La fórmula está pendiente de ser aprobada por las autoridades. Los que no se acojan a ella podrán acogerse a un arbitraje dirigido por la consultora KPMG.

Arbitraje selectivo

La solución del arbitraje tiene doble cara. Novacaixa comenzó a aplicar el suyo en el verano del año pasado. Recibió 12.000 solicitudes. Sin embargo, la entidad gallega se reservó la facultad de seleccionar a los inversores que podían acogerse al sistema. Los criterios de elección no se han hecho públicos. Todos los seleccionados obtuvieron laudos favorables y han recuperado el 100 % de la inversión. Parta el resto, NCG prevé aplicar un quita del 10 % en subordinadas y de entre el 30 % y el 70 % en preferentes, dependiendo de su fecha de emisión y, por tanto, de los intereses ya obtenidos.

Más incierto es el panorama de los inversores de Catalunya Caixa. El FROB dejará en manos de su nuevo dueño (actualmente está en proceso de subasta) la resolución del problema de subordinadas y preferentes. No obstante, la Junta Arbitral de Consumo de Catalunya está dictando laudos a favor de los inversores.