Mal arranque del año para las exportaciones valencianas. Las ventas al exterior se desplomaron un 6,1 % en enero con respecto al mismo mes del año anterior y rompieron la buena racha de crecimientos constantes que arrastraba desde hace varios trimestres. La mala campaña citrícola de la navelina y un parón técnico por obras en la factoría Ford de Almussafes explican en gran parte el frenazo en seco del sector exterior de la Comunitat Valenciana, que contrasta con la tendencia al alza del conjunto de España, con un 3,1 % más de ventas.

En total, las empresas de la Comunitat Valenciana facturaron en enero 1.801 millones de euros frente a los 1.762 millones importados, por lo que la tasa de cobertura se mantuvo en positivo con el 102,2 % y saldo comercial registró un superávit de 39 millones, según el informe mensual de Comercio Exterior que ayer publicó el Ministerio de Economía.

Con un descenso del 46,9 % en las ventas el sector del automóvil fue el que más contribuyó a reducir las exportaciones. El parón en la salida de vehículos de Ford fue la causa de este desplome. La factoría valenciana no retomó su actividad hasta pasado mediados del es de enero, por lo que sus cifras de ventas del período se resistieron.

También la exportación de cítricos cayó un 15,4 % por una plaga sufrida por la variedad de naranja navelina. En conjunto, el sector de la alimentación comercializó en enero un 8,9 % menos. Productos pesqueros y vinos también perdieron facturación, al igual que otras frutas y legumbres. Otro sector importante que sufrió un desplome en el primer mes del año es el de bienes de equipos. Facturó 174 millones, un 10 % menos que en enero de 2013. Aparatos eléctricos y maquinaria para la industria encabezaron la pérdida de ventas.

Por contra, sectores tradicionales como el textil, el calzado o el mueble siguieron creciendo.

Por provincias, Valencia concentró el desplome de las exportaciones al caer un 10,3 %.