La riqueza financiera neta de las familias españolas, la diferencia entre los ahorros y las deudas, creció el pasado año un 13,4 % hasta 1,170 billones de euros, cifra récord y por segundo año consecutivo por encima del billón de euros, según los datos publicados ayer por el Banco de España. Esto no quiere decir exactamente que los españoles sean ahora más ricos que hace un año, sino que la caída del crédito y el desapalancamiento, es decir, la reducción del endeudamiento de las familias, hacen que la diferencia entre ahorros y préstamos se haya incrementado en los últimos doce meses, en línea con la tendencia de los últimos años.

Los activos financieros de los hogares españoles „dinero en efectivo, acciones, depósitos y valores en renta„ se elevaban al concluir 2014 a 1,986 billones de euros, en tanto que sus pasivos o deudas alcanzaban 815.681 millones de euros, su menor nivel desde el año 2006. En depósitos y cuentas bancarias las familias españolas tenían 852.094 millones de euros al cierre de 2014, un 1,4 % menos que al finalizar 2013, en tanto que en acciones bursátiles y participaciones en fondos de inversión la suma alcanzaba 745.128 millones de euros, superior a los 641.794 millones de 2013.