La dirección de Lladró ha comunicado a los miembros del comité de empresa y a las secciones sindicales la necesidad de abrir un periodo de consultas y negociación para adecuar la plantilla a la demanda actual de los mercados en los que opera la compañía.

Con la intención de preservar el mayor número de puestos de trabajo y considerando una recuperación de las ventas, en el ejercicio 2013 se pactó con los trabajadores un expediente de regulación temporal de empleo que afectaba a un 30% de la jornada laboral para el periodo 2014-2016. Pese a las acciones llevadas a cabo estos años y a los grandes esfuerzos humanos y económicos, dicha recuperación no se ha producido y ello obliga a la firma valenciana a intensificar las medidas adoptadas hasta la fecha.

Como en todos los procesos de negociación laboral anteriores, la voluntad de la compañía, conocedora del profundo impacto de esta medida, es alcanzar un acuerdo con los trabajadores estudiando conjuntamente con los comités todas aquellas opciones que permitan atenuar en lo posible las consecuencias de la extinción de contratos.

A pesar del difícil momento que atraviesa la firma y de las duras decisiones que se deben tomar hasta que las ventas se recuperen, la dirección de la empresa tiene fe en el futuro y sigue apostando por la continuidad del proyecto empresarial.