Caixa Popular, una de las mayores cooperativas de crédito de la Comunitat Valenciana que se mantiene independiente, cerró el pasado ejercicio con un incremento del 18 % en sus resultados antes de impuestos, según los datos hechos públicos ayer por la entidad. Los beneficios brutos se situaron en 6,26 millones „frente a los 5,29 del año precedente„ después de realizar unas provisiones por valor de 12,8 millones.

La cooperativa experimentó un incremento del 15 % en los depósitos de la clientela, que pasaron en un año de 1.100 a 1.267 millones de euros, es decir, 167 más. La inversión crediticia también evolucionó de forma positiva, al crecer un 8 % y alcanzar los 790 millones. Estos datos se produjeron en un contexto difícil para el sector, como muestra la caída del 3 % en el margen bruto o del 24 % en el resultado de la actividad de explotación. El de intereses, no obstante, subió un 9 %. El ratio de eficiencia empeoró y pasó del 47,97 % en 2014 al 54,11 % de 2015. La morosidad se situó en el 9,14 %.

Asimismo, la entidad informó de que durante el pasado ejercicio ha aumentado tanto su red como su plantilla. En el primer caso, su número de oficinas creció en dos, hasta 66, tras la apertura de sucursales en Valencia, Almussafes y Chiva ( y el cierre de otra). El número de trabajadores aumentó en 27, con lo que Caixa Popular dispone de 329 empleados, el 81 % de ellos socios. Además, ganó 11.000 clientes, hasta 166.000.