CaixaBank obtuvo un beneficio de 814 millones de euros en 2015, un 31,4 % más que en 2014, a través del crecimiento del negocio bancario impulsado por la incorporación de Barclays Bank SAU „el negocio financiero de Barclays en España„, según informó ayer la entidad. El banco presidido por Isidre Fainé destacó la «fortaleza» de su negocio bancario (7.726 millones de margen bruto, +11,3%), la contención y racionalización de los gastos recurrentes (-1,2 % con perímetro homogéneo) y las menores dotaciones para insolvencias (1.593 millones, con una bajada del 23,6 %). La morosidad acabó el año en el 7,9%, frente al 9,7 % del cierre de 2014, y la incorporación de Barclays Bank SAU impulsó el crecimiento del margen de intereses (4,8 %, hasta un total de 4.353 millones), los ingresos por comisiones (10,3 %, hasta 2.013 millones, por el aumento de la comercialización de productos fuera de balance), los créditos sobre clientes (4,7%) y los recursos de clientes (9,1%).

Los créditos sobre clientes brutos ascienden a 206.437 millones tras la incorporación de Barclays Bank SAU y el menor desapalancamiento crediticio, y la cartera sana sin promotor ha crecido un 7,7 % (13.231 millones), aunque la cartera total se ha reducido un 4 % «por la significativa reducción de la exposición orgánica al sector promotor» (-33,6% en 2015). Además, la nueva producción de crédito aumenta un 27 % en relación al 2014: el hipotecario crece un 57 %, el de consumo un 48 % y el de empresas un 23 %. Los recursos totales de clientes se sitúan en los 296.599 millones, manteniéndose la canalización del ahorro hacia productos fuera de balance; la cuota de depósitos se sitúa en el 15,3 %.

CaixaBank señaló que en 2015 ha alcanzado el liderazgo en productos de inversión y previsión en patrimonio gestionado, y que mantiene el liderazgo en banca en España con una cuota de penetración de particulares del 28,3 %.

Por otro lado, La Caixa ampliará el presupuesto de la Obra Social hasta los 530 millones de euros en 2019, lo que supone un 6 % más respecto a los 500 millones presupuestados para este año, según consta en el plan estratégico de la Obra Social 2016-2019 aprobado por la fundación de la entidad catalana.

Fainé se mostró durante la rueda de prensa de presentación de resultados convencido de que lo que calificó de «fuertes turbulencias en los mercados financieros» en lo que va de año, marcadas por las incertidumbres sobre China y el descenso del precio de las materias primas, han sido «movimientos exagerados que irán corrigiéndose a los largo del ejercicio». Por su parte, el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, cifró en 342 millones de euros el impacto en el banco de las pérdidas anunciadas por Repsol para 2015 tras provisionar 2.900 millones por la caída del precio del petróleo, según Europa Press.