La Comunitat Valenciana está liderando la recuperación inmobiliaria por la demanda extranjera sobre todo en el sur de Alicante. Según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística, las comunidades con más transmisiones por cada 100.000 habitantes fueron la Comunitat Valenciana con 1.322 y Baleares con 1.177. Los analistas coinciden en que detrás del fuerte repunte de la compra de vivienda en la Comunitat Valencia está el interés de los británicos y nórdicos por adquirir segundas residencias. La recuperación, según explicó ayer Solvia, comenzó en el área entre Pilar de la Horadada y Santa Pola, y en el último año se ha extendido a Valencia. La excepción es Castelló donde los expertos calculan que la situación se normalizará dentro de tres o cuatro años.

La venta de viviendas ha crecido en el último año en la C. Valenciana un 11,3% con un total de 51.788 operaciones. Alicante concentró 26.843 transacciones, Valencia 19.109 y Castelló 5.836. Las cifras están muy lejos de las 110.717 ventas cerradas en 2007, pero suponen la confirmación de la recuperación. El Servicio de Estudios del BBVA (BBVA Research) asegura que España se encuentra ante el inicio de un nuevo ciclo expansivo y sostiene que las bases son sólidas.

Alfredo López, director territorial de Levante de Solvia Inmobiliaria, precisó que la recuperación está teniendo especial intensidad en la franja costera de la Vega Baja y Santa Pola. La demanda ya ha provocado la promoción de obra nueva, aunque entre el 80 y 90% de los compradores son extranjeros. En la ciudad de Alicante la demanda se concentra en Playa de San Juan. La clave es que las promociones de pisos se están comercializando a 1.800 euros el metro cuadrado. El interés por la compra ha llegado a poblaciones limítrofes de Alicante que no son costeras como San Vicent del Raspeig y Mutxamel.

Grupos de demanda

Fuentes del servicio de estudios inmobiliarios de Bankia explicaron que la venta de vivienda está cogiendo más fuerza en Alicante porque confluyen varios grupos de demanda: extranjera, particular e institucional. La razón es que los inversores están aprovechando el reajuste de precios de la costa porque son conscientes de que las viviendas se van a revalorizar ya que en determinadas zonas de Alicante se está acabando el stock. Las mismas fuentes precisaron que en Valencia la recuperación va un poco más lenta porque se encuentra en una fase previa.

El director territorial de Levante de Solvia indicó que en la ciudad de Valencia se venden sobre todo viviendas de segunda mano, aunque han detectado una «demanda contenida» de obra nueva. «El stock de vivienda nueva en Valencia es muy bajo y está aumentado el interés por la compra de solares», añadió. Solvia, inmobiliaria vinculada al Banco Sabadell, tiene ahora en marcha una promoción de 36 viviendas en la avenida Alfahuir que ha despertado el interés de más de quinientos compradores. La inmobiliaria ha detectado que promotores de Madrid y de Aragón quieren construir en Valencia.

El informe del INE refleja que el 78% de las ventas son viviendas de segunda mano y el 22% de obra nueva. Fuentes del sector advirtieron de que el dato no es fiable porque el INE considera de segunda mano las que llevan más de un año en venta aunque no hayan sido estrenadas.