El Producto Interior Bruto (PIB) de la Comunitat Valenciana crecerá el 3,3 % este año impulsado por el sector servicios, que será el único que acelerará su actividad en comparación con el año pasado, mientras que en 2017 el crecimiento será del 2,6 %, según las previsiones de Funcas.
Del mismo modo, la ralentización del sector servicios frenará el crecimiento el próximo año, estimado en el 2,6 %, en el que se prevé una menor actividad de todos los sectores, según recoge el informe de revisión de las previsiones regionales para 2016-2017 de Funcas hecho público hoy.
El PIB real per cápita crecerá más que la media nacional en ambos ejercicios, ayudado por un mayor descenso demográfico, lo que permitirá a la Comunitat aproximarse hasta el 89,1 % del PIB per cápita nacional.
El empleo en términos de EPA aumentará un 2,6 % y un 2,2 % en 2016 y 2017 respectivamente, y el incremento de la población activa, a diferencia de lo que sucederá en la mayoría de las comunidades autónomas, moderará el descenso del desempleo hasta tasas del 21,2 % y del 19,9 % respectivamente en cada año, desde el 22,8 % de 2015.
La Comunitat Valenciana será una de las CCAA que crecerán por encima de la media del 3,1 % este año, junto a Baleares, Castilla-La Mancha, Cataluña, Galicia, Madrid y País Vasco, seguidas de Aragón o Navarra.
Según los datos de contabilidad regional, el PIB de la Comunitat Valenciana avanzó un 3,6 % en 2015 impulsado por el fuerte dinamismo de los servicios de mercado y por la industria.
El empleo se elevó un 3,4 % según la Contabilidad Regional y un 4 % según la EPA, y las cifras de afiliación a la Seguridad Social recogen un ascenso del empleo del 4,3 %, con una tasa de paro media anual del 22,8 %.
Según el indicador de actividad Funcas, en los dos primeros trimestres de 2016 el crecimiento económico superó a la media española, aunque la tendencia fue de desaceleración.
El Índice de Producción Industrial (IPI) creció más que la media nacional en la primera mitad de este año, al igual que el número de afiliados a la Seguridad Social en el sector, aunque el ritmo en ambos casos fue inferior al observado en 2015.
No obstante, la evolución de las exportaciones, al contrario que los anteriores indicadores, fue negativa.
En los servicios, el crecimiento fue incluso más vigoroso que el registrado en 2015, ya muy elevado, y destacan los fuertes ascensos registrados en el número de pernoctaciones y en la entrada de turistas.
El índice de cifra de negocios y los afiliados a la Seguridad Social en el sector también crecieron algo por encima de la media. En su conjunto, estos indicadores apuntan a que esta fue, junto con Castilla-La Mancha, la región donde más ha crecido este sector en la primera mitad del año.
En el sector de la construcción los resultados también han sido positivos: la actividad residencial presentó tasas de crecimiento positivas y ascendentes, lo que permitió contrarrestar la caída de la obra pública, y el crecimiento de la afiliación a la Seguridad Social hasta septiembre ha sido uno de los más elevados de todas las comunidades.
En cuanto a la demanda doméstica, las ventas minoristas presentaron un crecimiento relativamente intenso y estable en la primera mitad del ejercicio.
El número total de afiliados a la Seguridad Social hasta septiembre ha crecido un 4,3 % interanual. Hasta el segundo trimestre del año el empleo aumentó el 2,9 % según la EPA y el paro descendió al 21,3 %.
Respecto a las cuentas públicas de la Comunitat, en 2015 tuvieron un déficit del 2,51 %, y entre enero y julio de este año el déficit se ha situado en el 0,08 %, frente al 1,09 % del mismo periodo del año anterior.
