El aterrizaje de la concesionaria valenciana de hospitales Ribera Salud en Colombia no ha sido del todo bien recibido. El 24 de mayo, la firma valenciana entró de lleno en ese mercado al hacerse con el concurso de privatización de la mayor aseguradora de Colombia, Cafesalud. Esta aseguradora con más de seis millones de afiliados, tuvo que ser rescatada en 2011 por el Estado colombiano. Hasta ahora estaba dentro de la corporación Saludcoop, de la que ahora se ha desgajado, junto con la red de hospitales, agrupados dentro de la firma Esimed.

Ribera Salud, participada por Sabadell y la americana Centene, se ha hecho con la gestión de 24 hospitales y 40 centros de salud colombianos al ganar el concurso en alianza con el consorcio Prestasalud, y tras imponerse a la empresa local Sanitas EPS Salud. Su oferta fue de 250 millones.

En este contexto, la Procuraduria General de la Nación, una institución similar por competencias al Tribunal de Cuentas español, ha emitido unas alegaciones a este concurso, que ha materializado en una carta a la liquidadora para que «clarifique sus inquietudes con prontitud», según el procurador general, Fernando Carrillo.

Concretamente, el jefe de este organismo que fiscaliza la tarea de los funcionarios públicos y la misma gestión pública, afirmó que «lo que está en juego es el derecho a la salud de millones de colombianos». Varios organismos colombianos realizaron un estudio pormenorizado con «objeciones fundadas» al proceso de adquisición de esta entidad promotora de salud (EPS). En el sistema colombiano de salud, las EPS son las entidades que intermedian entre los pacientes y los hospitales.

Sin experiencia en seguros

En el documento enviado, el Ministerio Público planteó sus inquietudes y observaciones al proceso y afirmó que el único proponente con una oferta integral carecía de experiencia en materia de aseguramiento en salud, explicó la Procuraduría. Además, «el proceso no reflejaba una sana competencia, ni la materialización de una puja económica que favoreciera financieramente los recursos del proceso de liquidación de Saludcoop y consecuentemente los del Sistema de Salud».

«Para la Procuraduría General de la Nación no es equiparable la experiencia en la prestación de servicios de salud a la experiencia en materia de aseguramiento en salud, siendo esta última la necesaria para este proceso de venta en curso», advierte la carta a la agente especial liquidadora. Ribera Salud señaló no tener conocimiento de ninguna impugnación y restó importancia a estas valoraciones.