El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, perfiló el pasado miércoles un encuentro bilateral entre las autoridades portuarias de València y la localidad canadiense de Montreal que el jefe del Consell confía en que sirva para profundizar en la colaboración entre ambos recintos para beneficio de las exportaciones de las pymes de la Comunitat Valenciana.

En el marco de la misión comercial que desde el pasado sábado rastrea las opciones de abrir nuevos negocios entre la autonomía y el país norteamericano bajo el amparo del Ceta, el acuerdo de libre comercio entre Canadá y la Unión Europea, Puig mantuvo una reunión con los principales directivos del puerto de la capital del Quebec y, tras una conversación previa con el máximo responsable de la Autoridad Portuaria Valenciana (APV), Aurelio Martínez, cerraron un acuerdo para una próximo reunión entre ambas instituciones "para buscar fórmulas que mejoren los servicios y las tarifas y, en consecuencia, a las pymes exportadortas valencianas".

Puig recordó que el 26% de las mercancías que llegan al puerto de Montreal proceden del de València. Se trata de una relación que "ha crecido mucho en el último año" y que el jefe del Consell espera que aumente aún más porque la instalación portuaria de la ciudad quebequesa debería convertirse en la puerta de entrada a toda norteamerica para las pymes valencianas que, según Puig, deben aprovechar las oportunidades que ofrece el mencionado Ceta.

Mientras los empresarios que acompañan a Puig dedicaban la jornada a visitar a potenciales proveedores o clientes, la parte institucional de la delegación, encabezada por el jefe del Consell, el conseller de Economía, Rafa Climent, y los presidentes de la Cámara de València, José Vicente Morata, y de la patronal autonómica CEV, Salvador Navarro, visitó en primer lugar las instalaciones canadienses de la empresa cárnica valenciana Redondo Iglesias, que tiene desde hace seis años una planta de producción de embutidos a las afueras de Montreal.