El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) ha decidido de forma unánime elevar los tipos de interés en un cuarto de punto porcentual, hasta un rango objetivo de entre el 1,50% y el 1,75%, cumpliendo así las expectativas del consenso del mercado, que confiaba en que Jerome Powell debutaría con el primer incremento del precio del dinero de 2018.

La Fed ha concluido, tras el cónclave celebrado entre el martes y el miércoles, que la posición de su política monetaria continúa siendo "acomodaticia", proporcionando así un fuerte respaldo a las condiciones del mercado laboral y hacia un retorno sostenido de la inflación al 2%.

La autoridad monetaria ha señalado que los últimos datos recibidos muestran que el mercado laboral ha continuado fortaleciéndose y que la actividad económica ha aumentado a un ritmo moderado. Asimismo, aunque confía en que la inflación alcanzará el objetivo del 2% en el medio plazo, ha aseverado que aún sigue siendo baja.

"El Comité sigue considerando que con ajustes graduales de su posición monetaria, la actividad económica se expandirá a un ritmo moderado y las condiciones del mercado laboral se mantendrán fuertes", ha reiterado la entidad, que calca el mensaje lanzado en sus dos últimas reuniones sobre política monetaria.

De cara a futuro, el FOMC ha subrayado que el momento y la magnitud de futuros ajustes en el rango objetivo del precio del dinero dependerá de las condiciones económicas y las expectativas en relación con sus metas de máximo empleo y una tasa de inflación del 2%.

"Este movimiento no es el resultado de la necesidad de tomar medidas rápidas para contrarrestar la inflación, sino que es la primera señal de la Fed de abordar una política fiscal excesivamente expansiva con una economía a pleno empleo", ha señalado el economista jefe de Ostrum AM, de Natixis, Philippe Waechter.

Según ha explicado el experto, este ajuste de la Fed tiene como objetivo evitar la creación de desequilibrios masivos consecuencia de la "estrategia aventurera" de la Casa Blanca.

Dos alzas más en 2018

Por otro lado, la Fed ha publicado la actualización de sus previsiones macroeconómicas, así como las proyecciones de sus miembros sobre la evolución de los tipos de interés, uno de los elementos que el mercado más esperaba, pues la mayoría daba por descontado que la institución proyectaría hasta un cuarto incremento del precio del dinero este año.

No obstante, el dot-plot o diagrama de puntos ha permanecido prácticamente sin cambios, de forma que los gestores de la política monetaria del país norteamericano mantienen sus proyecciones de un total de tres subidas de tipos en 2018.

Concretamente, la proyección central de la entidad apunta a que los tipos de interés cerrarán este año en un rango de entre el 2,1% y el 2,4%, frente al anterior 1,9% y 2,4%, escenario que sugiere tres subidas de tipos adicionales el próximo año.

Sin embargo, la Fed sí que ha elevado sus proyecciones respecto al precio del dinero para 2019, cuando prevé que los tipos subirán hasta alcanzar un rango de entre el 2,8% y el 3,4%, frente al 2,4% y 3,1% anterior, lo que sugiere una mayor agresividad en los ajustes.

En cuanto a la evolución macroeconómica, la Fed ha mejorado su pronóstico de crecimiento para 2018 hasta el 2,7%, frente al 2,5% anterior, mientras que el crecimiento del PIB en 2018 será del 2,4%, tres décimas más que la previsión anterior. Los cálculos para 2020 se mantienen en el 2%.

Asimismo, el banco central también ha mejorado su pronóstico para la evolución del mercado laboral, al rebajar una décima la tasa de paro estimada para 2018, hasta el nivel del 3,8% y que bajará hasta el 3,6% en 2019, tres décimas menos que la estimación de diciembre.

El mercado de trabajo estadounidense generó un total de 313.000 empleos no agrícolas el pasado mes de febrero y mantuvo la tasa de paro en el 4,1% (6,7 millones de desempleados), mínimos de hace diecisiete años, según datos del Departamento de Trabajo.

No obstante, la economía experimentó un crecimiento anualizado del 2,5% en el cuarto trimestre de 2017, siete décimas por debajo de la expansión del 3,2% registrada en los tres meses inmediatamente precedentes. En el conjunto del ejercicio, el PIB real de EEUU aumentó un 2,3%, ocho décimas más que el crecimiento registrado en 2016, cuando cerró el año en el 1,5%.

De su lado, la inflación mensual avanzó un 0,2% en febrero, aunque la inflación interanual se situó en el 2,2%, una décima por encima de la cifra registrada el mes anterior. Asimismo, la inflación subyacente mensual, que excluye el impacto de la volatilidad del precio de los alimentos y de la energía, repuntó un 0,2% febrero, mientras que la inflación subyacente interanual se elevó al 1,8%.