? Lo más sorprendente de la medida propuesta es la introducción de un nuevo parámetro al criterio ya existente del índice de madurez (relación azúcar/acidez) referido a naranjas y mandarinas. Ahora los sudafricanos plantean una segunda exigencia: un nivel de azúcar. Ajustarse a sendos requerimientos obligaría a retrasar varias semanas la comercialización de las satsumas y clementinas precoces españolas, lo que dejaría el mercado libre para ser ocupado por sus mandarinas tardías durante los meses de septiembre y octubre.
