Los secretarios generales de Comisiones Obreras y UGT-PV, Paco Molina y Gonzalo Pino, respectivamente, no ocultaron ayer su satisfacción por los resultados electorales cosechados por los partidos de izquierdas „y sobre todo, por la debacle del PP„ en las elecciones municipales y autonómicas del 24M. Los responsables de las centrales mayoritarias coincidieron al señalar que «se abre un tiempo de esperanza» y de « expectativas de cambio».

Según Molina, a partir de ahora podrían aplicarse tres cuestiones que la comisión ejecutiva de Comisiones Obreras considera claves: «cambiar las políticas, cambiar a los políticos y las maneras de hacer políticas». El dirigente de Comisiones considera que los resultados de las recientes elecciones «así lo reconocen y la sociedad, mayoritariamente, lo ha expresado en las urnas». Molina también destacó que el electorado valenciano «ha rechazado mayoritariamente las propuestas del Partido Popular». En su opinión, «por sanidad higiénica y democrática» era necesario un «cambio político» en la Comunitat Valenciana.

Respecto a su relación con el futuro Consell, el secretario general del sindicato con sede en la plaza Nápoles y Sicilia sostiene que «Comisiones Obreras es «responsable» y «ha realizado y realizará los acuerdos de gobierno que considere útiles para el conjunto de la sociedad y, especialmente, con los trabajadores, defendiendo siempre la independencia de la organización«, puntualizó.

La comisión ejecutiva de UGT-PV también expresó su satisfacción por los resultados de las elecciones autonómicas y municipales, en las que «los trabajadores de han dicho basta a las políticas neoliberales y conservadoras que llevaba practicando el Partido Popular durante los últimos veinte años desde el gobierno autonómico y desde los últimos veinticuatro años desde el ayuntamiento de Valencia».

Recuperar derechos sociales

La organización liderada por Gonzalo Pino comentó que la mayoría de los trabajadores «han respaldado a la izquierda para gobernar». En ese sentido, indicó que «ahora les toca a los partidos de izquierda responder a esa expectativa buscando puntos de encuentro para llegar a un equilibrio que dé pie al principio de la recuperación de los derechos sociales y laborales perdidos por la clase trabajadora». En opinión de la central ugetista, «hoy debe empezar el camino de la recuperación de la sanidad pública, de la educación pública, de la respuesta a la ley de la dependencia, de la necesidad de establecer una renta mínima garantizada de ciudadanía y de un largo etcétera de derechos y libertades perdidos».

La organización sindical estrechamente vinculada al PSOE durante otros tiempos comentó que es tiempo de «actuar con agilidad, y de conformar pronto los nuevos gobiernos de izquierdas, los gobiernos del cambio en los ayuntamientos y en la Generalitat». Con ello, UGT-PV considera que «deberán dar respuesta a la situación de emergencia» que vive la Comunitat Valenciana, «cuyo índice de pobreza se acerca al treinta por ciento de la población, lo que supone más de un millón de personas». El sindicato lamentó la existencia de cerca de 600.000 personas en desempleo, de las cuales 250.000 no perciben ninguna prestación social.

El sindicato espera que los partidos «estén a la altura de la situación y sepan ponerse de acuerdo al margen de personalismos y en favor de la ciudadanía que les ha dado su apoyo».