El caso Cubillas -el antiguo etarra Arturo Cubillas, convertido en alto cargo del presidente venezolano Chávez, y denunciado como probable interlocutor entre los etarras que acuden a Venezuela a ser "preparados" en armamento y tiro en campamentos de las FARC-, sigue entorpeciendo las relaciones entre los respectivos Gobiernos y naciones. Cubillas, como es sabido, ha sido reclamado por los jueces españoles por los datos que poseen sobre su relación singular con etarras que viajan a Venezuela y reciben formación en campamentos de las guerrillas de las FARC. Ahora, el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, ha afirmado que no va a "tolerar que el terrorismo tenga ningún tipo de soporte internacional" y ha pedido a la Fiscalía de Venezuela que investigue si el etarra Arturo Cubillas ha apoyado a la banda, en cuyo caso, "o se entrega o se juzga".
Así lo manifestó al término del Foro de la Nueva Sociedad en el que intervino el presidente de la Audiencia Nacional, Ángel Juanes, y en la que el fiscal general subrayó que "en este asunto vamos a llegar hasta el fondo". Explicó que, "si existen indicios racionales" de que Cubillas, que trabaja para el Gobierno de Hugo Chávez desde 2005, ha apoyado a ETA desde Venezuela, o bien "tendrá que ser entregado a España o bien ser investigado y enjuiciado en aquel país", insistió antes de trasladar a la Fiscalía venezolana su deseo de que investigue a Cubillas porque no va a "tolerar que el terrorismo tenga ningún tipo de soporte internacional". Mientras tanto, Conde-Pumpido, destacó la "magnífica relación" entre las fiscalías española y colombiana, que siempre "han colaborado", y de la que espera información sobre el ordenador intervenido al ex jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Víctor Suárez, Mono Jojoy -que murió el pasado 23 de septiembre en un tiroteo- que puedan aportar nuevos datos sobre la supuesta alianza entre las FARC y ETA.
"Colaboración mejorable"
También Juanes aludió en su discurso al "principio universal" de "juzgar o entregar", aunque incidió en que la voluntad de Venezuela para colaborar en la lucha contra ETA es "totalmente mejorable". "Lo que se espera de un país que mantiene buenas relaciones con España es que o bien juzgue o bien entregue al supuesto delincuente, es lo que se espera y lo que es exigible", recalcó. Asimismo, aseguró que tanto la Audiencia como la Fiscalía han llevado la "instrucción hasta sus últimas consecuencias" y que, a partir de ahora, son las "gestiones diplomáticas y políticas las que deben tomar la iniciativa".
Cubillas, tras las intervenciones de dos jueces españoles, intervino, a su vez, ante las autoridades venezolanas para negar su relación y apoyo a ETA y para reclamar que sean investigados los interrogatorios de los dos etarras que confesaron su relación con él.
Por su parte, el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, exigió ayer una "respuesta definitiva" a Venezuela sobre la relación de ETA con las FARC y aseguró que el Gobierno utilizará todo los mecanismos diplomáticos, judiciales y policiales para derrotar a los terroristas "y hacerles volver" de ese país. Así respondió en el Congreso al portavoz de Exteriores del PP, Gustavo de Arístegui.
