El presunto cerebro de la trama de corrupción en Marbella (Málaga), Juan Antonio Roca, ha indicado que sus ingresos netos mensuales eran de unos 12.000 euros. "Le puedo garantizar que con 12.000 euros mensuales después de impuestos se puede vivir muy bien, y me refiero a llevar a los niños a un colegio bueno, permitirse algún viaje", ha contestado a preguntas del fiscal Anticorrupción, Juan Carlos López Caballero.

Roca ha sido el primero en declarar este martes en la reanudación del juicio del caso 'Malaya' con el segundo bloque, dedicado a analizar el blanqueo de capitales en operaciones y sociedades supuestamente vinculadas a éste, quien ha explicado que sus ingresos cuando estaba en la sociedad municipal Planeamiento 2000 era de más de 200.000 euros anuales, cantidad que se redujo cuando pasó a otra sociedad del Ayuntamiento.

Ha ratificado lo que ya manifestó en una de sus declaraciones durante la instrucción, cifrando su patrimonio antes de la administración judicial en aproximadamente unos 210 millones de euros, aunque con un pasivo de 120 millones, con lo que el neto sería de 90 millones de euros, cantidad que "para hacernos todos una idea, es lo mismo que ha valorado el administrador judicial las propiedades que está administrando", ha apuntado.

Ha indicado que compatibilizó su trabajo municipal con su actividad privada, fundamentalmente en el negocio inmobiliario, inicialmente con una sociedad Marbella Inversiones, empresa que liquidó y el dinero obtenido lo aplicó a distintas inversiones y parte de esos fondos es "dinero opaco a Hacienda", ha manifestado.

Ha reconocido como suyas, total o parcialmente, la mayoría de las sociedades investigadas en la causa, aunque no Maras Asesores, que, según ha dicho, era de otro de los acusados en este procedimiento, Salvador Gardoqui, aunque sí ha explicado que esta empresa llevaba la contabilidad de algunas de sus sociedades.

En este sentido, Roca ha señalado que el control de estas sociedades "dependía de mi", aunque la contabilidad y el proceso societario eran aspectos que llevaban o Maras Asesores o el gabinete jurídico madrileño Sánchez Zubizarreta Soriano Pastor.