Un fuego forestal que afecta a las localidades coruñesas de Boiro y Lousame obligó ayer a desalojar a vecinos del lugar de Moimenta. El incendio calcinó, según datos provisionales de la Consellería de Medio Rural, 295 hectáreas. Este fuego comenzó a las 16.15 horas en la parroquia de Tállara en Lousame y se decretó el nivel 1 por la proximidad del fuego a las casas. El incendio obligó a cortar entre las cinco de la tarde y las 20.30 horas la carretera que une Boiro con Noia.

En las labores de control y extinción de este incendio trabajaron un técnico, ocho agentes forestales, 18 brigadas, diez motobombas, tres palas, ocho helicópteros y seis aviones. El alcalde de Boiro, Juan José Dieste, declaró ayer que el incendio había sido "ideado milimétricamente", una teoría que respalda también la conselleira de Medio Rural, Rosa Quintana.

El regidor boirense, que se desplazó a las zonas más afectadas, dijo que el fuego había sido "orquestado y planificado" y que, quien lo hizo "sabía que había viento y que el fin de semana esto no ocurriría".

La conselleira de Medio Rural, Rosa Quintana, se centró ayer en la supuesta intencionalidad de este fuego, puesto que se detectaron cuatro focos "al mismo tiempo", entre los términos municipales de Lousame y Boiro.

Rosa Quintana aludió a la experiencia de las comunidades de montes y a un comentario que le hizo ayer el presidente de una de ellas: que el autor estaba muy enterado de todos los detalles, y, lógicamente, de que "con la dirección y fuerza" con la que se desplazaba el viento, la lumbre iba a ir "directa a las casas".