La industria del automóvil se encuentra inmersa en una auténtica cruzada contra las emisiones nocivas de los motores de combustión. Las cada vez más exigentes normativas que regulan los niveles de agentes contaminantes que emiten los vehículos, ha llegado a provocar una situación un tanto irreal. Un escenario en el que Mazda ha conseguido establecerse como uno de los referentes en materia de eficiencia y economía de consumo en el sector del motor.

Y para ello no ha tenido que recurrir a «revolucionarias» soluciones en materia de downsizing con los tan de moda motores de tres cilindros, ni mucho menos hacer de la electricidad su principal caballo de batalla, dadas las limitaciones aún existentes tanto de autonomía como de accesibilidad a su recarga -sobre todo en España-, a las que se enfrenta esta tecnología.

La estrategia de Mazda se basa en mejorar lo conocido. Es decir, seguir apostando por los motores de cuatro cilindros de cilindradas «coherentes», con el añadido de innovadoras soluciones que contribuyen a ajustar consumos y emisiones sin por ello tener que renunciar a unas prestaciones óptimas. Una línea de trabajo que ha caracterizado a su actual gama de propulsores gasolina Skyactiv-G y diésel Skyactiv-D, que equipan la totalidad de sus catálogos de turismos -2, 3 y 6- y todoterrenos -CX-3 y CX-5-.

Visión mazda 2030

No obstante, y con el propósito de seguir demostrando el amplio margen de evolución que le quedan a los motores de combustión, Mazda ha puesto en marcha el proyecto «Sostenibilidad Zoom-Zoom 2030», con el que la firma japonesa pretende reducir hasta en un 50% los niveles de emisiones de CO2 en su gama.

La primera consecuencia de este proyecto está siendo el desarrollo del motor de gasolina Skyactiv-X. Se trata de un 4 cilindros capaz de ofrecer el rendimiento de un gasolina con la economía de un diésel. Como principal novedad, este propulsor estrena un innovador sistema de combustión por compresión que recurre a unas bujías especiales de nueva factura.

Disponible en 2019 en una versión de 2.0 litros para el Mazda3, la tecnología Skyactiv-X se irá incorporando de manera paulatina en otras cilindradas y modelos.