En esa época diferentes medios informaron de que el ex jugador del Real Madrid y del Milán había aprovechado para someterse a una liposucción en la que le habrían retirado 700 mililitros de grasa localizada en los costados de la barriga.

La intervención nunca fue confirmada ni comentada por el Corinthians o por los asesores del goleador de la Copa del Mundo de 2002. Según las versiones de prensa, el tres veces mejor futbolista del mundo, que ha sido protagonista de sucesivas polémicas por su exceso de peso, tenía estudiada la posibilidad de someterse a la operación de liposucción desde hacía semanas, pero la tenía planeada para diciembre, cuando concluye el Campeonato Brasileño.

El jugador la habría anticipado para aprovechar que de cualquier forma tendría que pasar por el quirófano y que estará alejado de las canchas por casi dos meses debido a su fractura en la mano.

Ronaldo, que volvió a ejercitarse ayer martes tras la operación y necesitará de al menos otras tres semanas de recuperación, no pudo evitar preguntas sobre el asunto al comparecer hoy por primera vez ante los periodistas.

"Yo encaro con mucha tranquilidad (las preguntas sobre la liposucción) porque en mi vida siempre he sido así, un perseguido por ser quien soy", afirmó el atacante.

"Inevitablemente soy noticia hasta cuando no juego, pero acepto todo de buena forma", agregó. "Pero como yo dije en mi primera entrevista (como jugador del Corinthians), lo que yo hago en mi vida particular es problema mío", concluyó.

Ronaldo aseguró que apenas inició ejercicios de fisioterapia y que tendrá que reunirse con los médicos y la comisión técnica del Corinthians para programar su regreso a las canchas.

El goleador, que se había convertido en la principal esperanza de gol del Corinthians y ayudó al equipo a conquistar este año el Campeonato Paulista y la Copa do Brasil, ya se ha perdido cinco jornadas del Campeonato Brasileño, en las que el club no ha conseguido ninguna victoria.

El atacante necesitó de casi dos meses de trabajo en el Corinthianas para recuperar su forma física, tras recuperarse de la grave lesión en la rodilla que lo tuvo alejado de las canchas trece meses y que por poco lo hace desistir del fútbol.