La comunidad de propietarios del polígono Fuente del Jarro de Paterna ha mostrado su malestar porque el Ministerio de Fomento no ha dado «la más mínima respuesta» a las alegaciones que presentaron en abril de 2014 al proyecto de ampliación del by-pass, a su paso por la zona.
Como siempre ha defendido Asivalco, entre las principales argumentaciones, alertaban del incremento del riesgo de inundabilidad en la primera fase del polígono, al afectar el trazado al barranco de Travessat, tributario del de La Font, «que provoca graves problemas cada vez que llueve torrencialmente».
Otro grave inconveniente para el empresariaro era que la ejecución del proyecto podía comportar la expropiación y el desmantelamiento de empresas actualmente en funcionamiento. Frente a ello, Asivalco estima que existen trazados alternativos que no les afectarían.
Se han perdido inversiones
La entidad recuerda que la ciudad de Paterna y Fuente del Jarro, en particular, «ya han perdido algunas inversiones importantes de instalación de nuevas empresas o ampliación de alguna de las actuales, sobre terrenos colindantes con el actual by-pass, sobre solares de Sepes en la zona de afección de esta gran infraestructura».
Por otra parte, Asivalco alerta de que la ampliación del by-pass, tal y como está actualmente diseñada, «imposibilitaría la creación de una futura línea ferroviaria de mercancías para la industria de Paterna, que conectara con el futuro Corredor Mediterráneo», otra de las reivindicaciones del empresariado.
Por todo ello, los industriales de Fuente del Jarro, sólo ven «inconvenientes» en la ampliación de una infraestructura que, además, no conecta con ningún parque empresarial de la ciudad —ni con Fuente del Jarro, ni tampoco con Táctica o l'Andana— ni con las zonas residenciales vecinas como La Canyada.
Asivalco informa asimismo de que las empresas afectadas que realizaron alegaciones a título individual «tampoco han recibido ningún tipo de contestación, como tampoco nos consta que se haya respondido al Ayuntamiento de Paterna, que presentó también un recurso de reposición en Septiembre de 2015». La ampliación del by pass ha sido el caballo de batalla de la ciudad desde hace una década ya que tanto empresariado como ecologistas y las entidades vecinales se oponen desde siempre al proyecto.
