Tres días después del polémico pleno extraordinario donde se aprobó revisar de oficio la oposición a cinco plazas de la Policía Local -sesión en la que el exalcalde del PP Vicente Ibor recriminó a la concejala de Administración General, Beatriz Jímenez, que debía haberse abstenido de participar en un proceso revocatorio que «solo pretende evitar cumplir la sentencia firme» y «es una maniobra que beneficia a una sola persona, un amigo íntimo suyo»-, el tripartito del gobierno aprovechó el pleno ordinario de junio para sacar la artillería y cargar contra Ibor.
Compromís presentó el jueves una moción en la que se reprueba a Ibor por comentarios «del carácter más retrógrado y machista que nunca se han escuchado en este pleno», aseguró el portavoz de la coalición, Pep Val. «El señor Ibor ha acusado a la concejala de Hacienda y administración general de defender la legalidad para beneficiar a un amigo íntimo, entrando en el ataque fácil y machista hacia una mujer de la corporación», censuró el edil.
Jiménez intervino para defender su actuación y deslizó que tenía «muy claro por qué se cambiaron las bases -de la oposición para pasar de dos a seis plazas ofertadas-, aunque no lo dijo públicamente «porque no hay pruebas». Lo que sí apuntó es que «hay vínculos personales muy estrechos entre algunas de las personas que superaron el proceso y el Partido Popular», pero que «no vengo al pleno a jugar a Sálvame».
El concejal de Sanidad y Salud, Ricard Benlloch, (PSOE) consideró que las manifestaciones de Ibor «se hacen contra quien se hacen por el hecho de ser una mujer», y que «es muy grave que la vida personal se utilice para poner en cuestión lo que se está haciendo» desde el gobierno. Por su parte, Alberto Torralba, portavoz de PodEU, acusó a Ibor de «cantinflear» y de mantener una actitud «barriobajera». «Poner en entredicho la moralidad de una representante pública con hechos de su vida privada es irresponsable», sentenció el concejal.
Ibor,por sumarte, reiteró que Jiménez "incumplió la Ley al no abstenerse en un asunto Administrativo importante que claramente beneficiaba a un amigo íntimo. El cumplimiento de la Ley, y en este caso la necesidad de abstención que regula el art. 23 de la Ley de Procedimiento Administrativo no es una cuestión de género y conlleva graves responsabilidades legales". El portavoz popular asegura el tripartito, "consciente de esta vulneración legal que pusieron de manifiesto los partidos de la oposición han vuelto a hacer uso de su sectarismo para esta falsa reprobación".
Ibor mantiene sus tesis sobre Jiménez
El popular calificó de "insulto a todas las mujeres que realmente sufren por actitudes machistas en nuestra sociedad el hecho de utilizar falsamente este concepto para ocultar las graves irregularidades que están cometiendo y fundamentalmente toda la trama que la concejala Jiménez ha provocado con el único objetivo de evitar el cumplimiento de una sentencia que perjudica a una persona a la que protege. La legalidad de todo el proceso ha quedado perfectamente avalada por una contundente sentencia judicial que ahora se pretende incumplir por vía administrativa".
