Recorrerán las calles, los parques y otros espacios públicos con el objetivo de fomentar la convivencia, los valores urbanos y el conocimiento de las ordenanzas municipales. Desde esta semana, agentes cívicos vuelven a pasear por la población e incluso por la huerta para «mejorar la vida del vecindario en el espacio público».

Este proyecto fue impulsado por el gobierno del PSPV-PSOE en la etapa de Amparo Navarro en la alcaldía y, tras el paréntesis del PP, el actual ejecutivo lo recuperó el año pasado. Las funciones de los y las seis agentes que han comenzado a trabajar esta semana para el consistorio promover actitudes cívicas mediante la información y sensibilización con el fin de fomentar la convivencia, el buen uso de los espacios públicos y el mobiliario urbano, o asuntos comolos residuos o la recogida de los excrementos de los animales en la vía pública.

También colaborarán en la difusión e información de servicios municipales de interés para determinados colectivos, especialmente en lo relativo al cumplimiento de ordenanzas sobre la tenencia de animales y gestión de residuos. Asimismo, recogerán y atenderán las dudas y quejas de carácter práctico.

Por otra parte, los agentes cívicos destinados a la zona de huerta, velarán por la prevención de conductas incívicas o ilegales en la huerta, como pequeños hurtos, la falta de limpieza o la construcción de cobertizos ilegales.

Igualmente, su actividad se desarrollará en coordinación con los departamentos de Policía Local, en el desarrollo de programas específicos, y también en el área de Servicios Sociales, prestando ayuda al personal temas relacionados con familias en riesgo de exclusión, bono alimentario,drogodependencias o acoso escolar.

El alcalde, Guillermo Luján, asegura que tiene «muchas esperanzas puestas en este proyecto y en las seis personas que lo van a llevar a cabo», y espera que «el municipio sea un lugar donde el civismo sea la nota dominante».