Pasadas las fiestas populares y patronales, parte del equipo humano de la brigada municipal está combinando sus tareas de mantenimiento y jardinería con la retirada del mobiliario municipal de la playa, que se recoge en el Espai Voramar hasta la próxima primavera.

“Hay que buscar el equilibrio entre mantener las instalaciones municipales lo máximo posible, mientras el tiempo acompaña, y retirarlo antes de que llegue uno de esos temporales tan habituales a finales de septiembre y durante el mes de octubre”, apunta Xavier Alcácer, el concejal responsable de la playa.

Este año no ha habido temporal en las playas de la costa levantina hasta estos momentos, “aunque hemos tenido un clima raro a mediados de agosto, con mucho aire, y ahora, en septiembre, ha mejorado el tiempo. En cualquier caso, señalar que en nuestra playa el equipo de salvamento y socorrismo ha actuado en todo momento con diligencia y no ha habido que lamentar ningún incidente grave este verano”, continúa el concejal.

Al buen servicio humano hay que sumar los buenos resultados obtenidos por los análisis de cara a mantener los certificados de calidad: los datos sobre el agua han sido los mejores desde que Puçol tiene bandera Azul y, paralelamente, este verano no se han detectado algas ni medusas, por lo que Alcácer valora con optimismo la próxima temporada: “Continuaremos trabajando para mantener las certificaciones y obtener las tres banderas que actualmente tenemos en nuestra playa —Azul, Qualitur y Q de calidad turística—, aunque somos conscientes que el próximo año la normativa va a ser más exigente y tendremos que adaptarnos para mantener una playa de bandera”.