La prensa alemana y francesa apunta que Andreas Lubitz, copiloto del avión de Germanwings que se estrelló el pasado 24 de marzo en los Alpes, podría haber suministrado laxantes al piloto de la aeronave para que éste abandonase la cabina. Esta información se desprende de los datos extraídos de la tableta y ordenadores de Lubitz. Según fuentes policiales, el piloto habría consultado en Internet la eficacia de estos preparados en los días previos a la tragedia.

Andreas Lubitz buscó también Internet diferentes maneras de suicidarse. El presunto copiloto suicida realizó estas búsquedas entre los días 16 y 23 de marzo. Es decir, en las fechas previas al accidente del avión de Germanwings.

Además, y tal y como apuntas fuentes de la fiscalía de Düsseldorf, Andreas Lubitz se habría documentado también sobre el bloqueo de las puertas de las cabinas de vuelo y las medidas de seguridad de las mismas.