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Entrevista

Pedro López: "Con Alcaraz viví los peores seis meses de mi carrera deportiva"

"No voy a cambiar en nada, porque desde que vine he querido ayudar dentro y fuera del campo", indica

Pedro López: "Con Alcaraz viví los peores seis meses de mi carrera deportiva"

¿Qué sensaciones le está dejando la pretemporada?

Muy buenas. Estamos todos un poco cargados porque los entrenamientos son muy intensos y muy seguidos, pero en esta época es lo que tenemos que hacer, cargar el cuerpo de trabajo porque la temporada, si en Primera era larga, en Segunda lo es más todavía.

¿Qué supone llevar ahora el brazalete de capitán?

Desde que llegué he intentado ayudar al compañero, estar para lo que sea, intentar sumar... Es cierto que siendo el primer capitán tienes más responsabilidad en el vestuario y el día a día. No voy a cambiar en nada, porque desde que vine he querido ayudar dentro y fuera del campo, y eso es lo que voy a hacer.

¿Se le hacer raro no tener a Juanfran dentro del vestuario?

Se lo decía el otro día a él. Es raro mirar a la izquierda en la caseta y que no esté. Han sido cinco años muy intensos, con sensaciones positivas y negativas. Pero todo tiene su etapa y esta ya la ha quemado él. Tengo otros magníficos compañeros y hay que seguir hacia delante.

Se ha hablado mucho de la falta de referentes desde la marcha de Iborra, Ballesteros...

Ballesteros y Juanfran son capitanes inigualables, gente que se ha partido la cara por este club. Los que estamos haremos lo máximo por hacerlo igual o mejor, luego que a la gente le guste o no, ahí no podemos entrar.

¿Qué opina del nuevo vestuario que se está armando?

Se está haciendo una mezcla, con mucha gente joven, pero al final los cinco o seis veteranos que estamos podemos aportar cosas que en un temporada larga pueden ser importantes en un vestuario y en un campo de fútbol. A nivel humano, el vestuario es espectacular. Ha de ser bueno dentro del campo y fuera, para cuando haya problemas o surjan cosas, se pueda hablar y entre todos nos ayudemos.

¿Esa fue la clave del vestuario del Levante UD hace años?

Para mí, un vestuario unido es cuando uno juega y el otro lo respeta y entrena. Entiendo al que se pueda enfadar, pero no entiendo al jugador que, como no juega, no entrena. Esto es para uno mismo, pero también para todos. Por mi experiencia, cuando me han ido bien las cosas ha sido porque los 23 que estábamos nos hemos respetado. Cuando eso se da, normalmente llega el éxito.

¿El año pasado con Lucas Alcaraz vivió su época más dura?

Sí, sinceramente, ha sido la época más dura, porque nunca había estado en esa situación. El entrenador que estaba no me decía qué era lo que tenía que mejorar y yo no iba a hablar con él, porque no soy mucho de ir a hablar con entrenadores. Lo que hago es entrenar a muerte y ya está. La sensación de que no avanzas, de que cuanto más entrenas menos juegas, para mi fue muy frustrante. En la carrera deportiva de un jugador puede ser que te pase algo así. Han sido los peores seis meses de mi carrera deportiva con mucha diferencia. Pero tenía que respetar a mis compañeros, entrenar y estar listo para jugar y así fue. Llegó Rubi y me dijo: «Para mí, vas a jugar. En Mestalla , 90 minutos. Para mí vas a ser importante y confío en ti». A partir de ahí empecé a jugar.

¿Se sintió maltratado por Alcaraz?

Sólo buscaba entrenar, que para eso nos pagan, y respetarme a mí mismo. No podía abandonarme ni bajar los brazos. Tenía que cuidarme, al final era hacerlo por mí. Mi ADN es el de entrenar a muerte. No sé entrenar de otra manera. Hay días de «bajón», pero hay que estar listo para lo que sea.

¿Qué le dijo Tito cuando llegó al club?

Me llamó cuando estábamos de vacaciones y me dijo que contaba conmigo, en una charla informal. Que había que desconectar de la temporada pasada para empezar otra muy larga y dura.

¿Podrá hacerse borrón y cuenta nueva tras las indisciplinas de la temporada pasada?

Quiero pensar que sí. Son malentendidos que suceden durante una temporada que hay que borrarla y olvidarse de ella. Fue nefasta en todos los sentidos. Y ahora, pensar en partido a partido, no meternos en la cabeza que somos un exprimera. Tenemos que ser humildes y aceptar la nueva situación y pensar que esto es muy largo, que no será fácil subir a Primera.

¿Se puede reenganchar a la afición con una buena temporada?

No es suficiente que yo diga que queremos darle alegrías a la gente, lo tenemos que demostrar cada día y en cada partido. Hay que hablar en el campo. Estoy deseando transmitir las ganas de hacer bien las cosas sobre el césped. No hay palabras de agradecimiento hacia la afición, porque el año pasado tuvo mucha paciencia con nosotros y nos mantuvo con opciones hasta el final.

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