El castizo Atleti, que se reivindica a menudo como el equipo del pueblo, o algo así, es uno de los grandes clubes de la Liga que ha sucumbido al poder del capital foráneo. Sólo ellos y el Valencia, entre los nueve que tienen en sus vitrinas alguna liga, lo han hecho. Aunque en el caso colchonero Wang Jianlin sólo atesora el 20 por ciento de los títulos y Wanda patrocina el Metropolitano. El resto es de la familia Gil (57 por ciento) y de Cerezo (20 por ciento). Es curioso como funciona España: el Atlético se abrió al capital asiático pero no para liquidar su deuda, que ronda los 500 millones. ¿Equipo del pueblo? ¿De qué pueblo? ¿Del que acaba pagando los desmanes del fútbol?
El auténtico equipo del pueblo es el Llevant, que tiene previsto saldar su deuda el próximo verano. Tras ello sólo le quedarán los préstamos bancarios que mantiene por valor de 14 millones. Lo que debería ser normal, en nuestro fútbol se convierte, por insólito, en una proeza y un motivo de orgullo para todo el levantinismo: un club sostenible y honrado, al margen de la economía especulativa imperante, que no juega con la leche de la vaca antes de ordeñarla.
Otro de los tópicos que suelen escucharse sobre el Atlético es el carácter que les imprime Simeone y que lo convierte en un once aguerrido, peleón y luchador. Sin embargo esa escuadra se narcotiza cuando llega a Orriols, donde encuentra la horma de su zapato: un rival capaz de aplicar más intensidad al partido durante 90 minutos. Sucedió incluso en su última visita, con el Llevant mascullando ya el añito en el infierno y el Atlético apurando sus opciones al título, en la penúltima jornada. Rossi en el 90' dio el triunfo a los blaugrana (2-1) para sellar la tradición de que el Atleti salga escaldado del estadio granota.
El Llevant viene, además, de reconciliarse con la victoria en un partido que tenía que ganar sí o sí. Y con un puñado de buenas sensaciones, con nombre propio: Oier, Jason, Shaq, Ünal, Bhardi, Róber, Doukouré, etcétera.
Hoy es un partido muy distinto al del Insular. Aquel estaba lleno de urgencias. En este no hay nada qué perder. El Atleti llega con pie y medio fuera de Champions pero invicto en Liga. Es un encuentro con el que vibra cualquier militante de la causa granota, incluidos los futbolistas que, más que nunca, se vaciarán en el césped y tratarán de mostrar el talento que atesoran.
El Llevant aspira a dejar de nuevo en evidencia la vulnerabilidad de los de Simeone por estos lares. El principal hándicap es la falta de músculo en la medular. No sería una sorpresa que Muñiz busque el control del balón, con el equipo adelantado, como la mejor defensa ante un rival poderoso físicamente. La otra opción sería hacer debutar al canterano mauritano El Hacen (19 años), un portento que sigue los pasos de Lerma. Todo vale para conseguir una victoria de prestigio y retormar la senda del inicio liguero.
Hoy Orriols se sumará el duelo por Jaume Ortí, uno de los mejores presidentes del Valencia CF y un gran simpatizante del Levante UD.
