Los trabajadores de la residencia de discapacitados psíquicos «Nuestros Hijos» volvieron a concentrarse ayer durante una hora y media en el Port de Sagunt para protestar por los impagos que arrastran y que les han llevado a convocar una huelga indefinida para finales de este mes.

Ahora mismo, la firma que gestiona este centro público de la Generalitat les adeuda una nómina y media, «con todo lo que eso supone para las familias», como apuntaba la presidenta del comité de empresa, Angeles Martínez. Estas situaciones, según denuncia, «se vienen repitiendo periódicamente desde hace cinco años, sin que se haya visto ningún cambio desde la última vez que la conselleria le volvió a adjudicar el servicio, por mucho nos quejáramos antes y no nos explicáramos cómo ese trato al trabajador no era tenido en cuenta cuando se eligió a la misma empresa», agregaba.

Martínez afirmaba que los ánimos están calientes y que «por unanimidad» se decidió ir a una huelga indefinida. «La gente está muy cansada por mucho que ayer nos pagaran media nómina». En este sentido, insistía en que lo único que les llevaría a valorar el desconvocar la huelga es si la empresa les pagara lo que les debe y se comprometiera a no seguir incumpliendo los pagos.

Desde la plantilla se reconocía una gran incertidumbre por el hecho de que la empresa que gestiona la residencia, Sturm 2000 SL, se haya declarado en concurso de acreedores. Sin embargo, desde la empresa se apuntaba a preguntas de Levante-EMV que ni peligra su continuidad ni el empleo de la residencia. «Existe la seguridad de que van cobrar sus nóminas y de que se mantienen los puestos de trabajo», afirmaban desde su departamento de comunicación aunque sin poder precisar cuándo. «Sturm 2000 no tiene ningún problema de solvencia a excepción del embargo que la Agencia Tributaria ha realizado sobre los créditos de la Generalitat con los que se paga a la empresa por su gestión. Ese embargo le viene por ser filial de Cleop», decía además de insistir en que Sturm se ha declarado en concurso voluntario de acreedores para «garantizar la continuidad de la empresa y preservar los intereses de los trabajadores ante los embargos emitidos por parte de la Agencia Tributaria, segundo mayor acccionista de la matriz, Cleop».

Respecto a cuándo se resolverá la situación actual, apuntaban que «hay que esperar a que se conceda el concurso. Luego se solicitará el levantamiento de embargo y a partir de que se haga, se puede empezar a disponer de fondos para pagar nóminas. No sabemos plazos exactos de cada fase», añadían además de agregar que los trabajadores «tuvieron información al día siguiente de la presentación del concurso». También destacaron que aunque la plantilla haya sufrido retrasos en el pasado «nunca ha dejado de cobrar» y que las causas entonces eran «las demoras de la administración en pagar, que a veces eran de hasta año y medio», mientras ahora el tiempo medio está entre 6 y 7 meses».