La propuesta presupuestaria del cuatripartito de Sagunt para 2018 no ha gustado a la oposición. Entre las críticas destacan las del PP sobre unas cuentas «hechas a la medida de sus necesidades para mantener el pacto y no a las de la ciudad», las segregacionistas que alertan sobre el crecimiento de la deuda y las de Cs, que acusa al gobierno municipal de hacer «funambulismo financiero».

Por una parte, los populares señalan que Compromís, ADN Morvedre, EU y PSPV «gastan sólo en personal y funcionamiento 12 millones de euros más que en el anterior gobierno del PP», en palabras de Sergio Muniesa. «No dudan en subir impuestos, incrementar las tasas y endeudar al ayuntamiento con un préstamo de 7, 5 millones para intentar cuadrar las cuentas», añade.

Así, el exalcalde considera que este presupuesto es «un castigo en toda regla a los vecinos de la ciudad, que han de soportar los caprichos y desmanes de un gobierno que pretende recuperar el apoyo ciudadano a golpe de talonario, mientras les quita el dinero con tasas, deuda e impuestos para sufragar sus políticas sectarias, circenses y partidistas».

En esta línea, Manuel González (IP) pone el acento sobre «el aumento del 50 % en la deuda en tan solo tres ejercicios de este gobierno, que despilfarra el dinero de los ciudadanos con un presupuesto inflado». El segregacionista censura también que, algunos conceptos de las cuentas, «están llenos de números aleatorios, porque no se han cumplido las previsiones en 2017, pero mantienen el engaño con una cifra más alta». Este es el caso, según González, del impuesto de construcciones, instalaciones y obras (ICIO), la venta de solares o varias tasas.

Inversiones sin proporcionalidad

El portavoz de IP lamenta de igual forma que las inversiones «no cumplan la proporcionalidad, lo que inclina la balanza de manera descarada hacia el núcleo de Sagunto». En este sentido, el portavoz de IP sigue su cruzada contra el campo de fútbol proyectado en el polideportivo internúcleos y pide explicaciones a EU y ADN Morvedre, que ya han mostrado sus reticencias acerca de esta instalación deportiva.

Raúl Castillo, por su parte, señala el problema que considera más grave en este presupuesto: «La ausencia de una política de control del gasto y planificación en la ejecución». Además del préstamo «para salvar unas cuentas irreales y descuadradas», el portavoz de Cs recalca que «han aumentado exponencialmente el gasto corriente. Es una gestión del dinero público nefasta y estoy seguro de que el resultado de este desequilibrio grave lo vamos a empezar a notar antes de que acabe la legislatura».

Castillo también destaca el peso de la inspección tributaria en el apartado de los ingresos y es que «el funambulismo financiero es un arte que manejan a la perfección desde el equipo de gobierno. El problema es que quienes pueden caer al vacío no son ellos, sino los ciudadanos» de Sagunt.