El Arzobispado de Valencia ha de buscar cuanto antes qué local de los que tiene puede ceder gratuitamente a la Fundación Padre Juan Schenk, para poder recoger y almacenar los libros que la Biblioteca Solidaria envía a las misiones desde hace cinco años. La entidad se ha quedado sin local en Valencia al concluir la cesión del que venían utilizando en la calle Adreçadors, 16. Al parecer, en lugar de dirigirse al Arzobispado, los responsables de la fundación han recurrido a los medios de comunicación de este para pedir que particulares o entidades faciliten un local o den dinero para costear un alquiler. Se ve que la nave de la antigua fábrica Cros, regalada por el ayuntamiento a la Iglesia, ya se ha llenado de actividades. Y eso que era tan grande que el templo dedicado a los llamados Mártires (de 1936) sólo ocupaba una pequeña parte de la inmensa construcción. En ese caso, también podían ir al bajo de algún edificio de esos que se recalifican para frailes visionarios. A buscar bien.