La salió a la luz el 5º informe del Panel Internacional para el Clima. Nada ha cambiado ¿Por qué esperar que lo hiciera?. Desde 1990, justo cuando salió el primer informe, la temperatura global apenas ha subido dos ó tres décimas de grado. Y desde 1998, nada de nada. Aún así, la Humanidad sigue siendo la gran causante del supuesto Cambio climático, pero otros factores, naturales, han de explicar esa pausa. Ya comentamos los estudios que señalaban, respectivamente, al aumento de las emisiones de dióxido de azufre y su efecto de enfriamiento por parte de pequeños y medianos volcanes y a los océanos que habrían tomado parte del calor atmosférico y detenido el calentamiento. Este pasado agosto el Met Office británico sumo tres nuevas investigaciones a la artillería de argumentos para intentar explicar lo que el efecto invernadero humano ya no puede: la reciente pausa en el calentamiento. Eufemística definición para 15 años. Una buena avanzadilla a la flota del IPCC. El primer artículo sirve para insistir en otros indicadores de cambio climático, al margen de las temperaturas, en atmósfera, criosfera y océanos. El segundo, para justificar que estas pausas no son inusuales y ya estaban predichas por los modelos y se escuda en el océano para explicar este parón térmico. Sorprendente afirmación tras ver las líneas ascendentes ininterrumpidas propias de los modelos. El tercero, avanzado por el anterior, es la defensa de los modelos climáticos y que incluso con la pausa térmica los resultados están en el rango predicho. No es de extrañar puesto que el último informe del IPCC da una subida de 4´8 ºC para el 2100. De máximo. Por debajo la horquilla da un mínimo de 0´3 ºC, es decir, nada. Así, es difícil fallar. Por si acaso, las predicciones, para 2085. Astutos.
