Que un derecho se convierta en duda, en arma arrojadiza, es un escándalo, y más cuando se trata de un derecho como la atención sanitaria. La salud es un derecho que tenemos todos los humanos y no conoce de papeles o de situaciones irregulares. Inmigrantes o del terreno, es una cuestión de lógica, de humanidad, y parece ser que el ministerio continúa con su despiadada acción contra algo que es de justicia social.

Es quizás más asombroso que el Sr. Moreno, quien estuvo al frente de la subsecretaría de la Conselleria de Sanidad en el Gobierno de Zaplana e impulsó el derecho a la asistencia sanitaria a ciudadanos extranjeros en la Unión Europea y q ahora que está en el grupo del Sr. Rajoy, avise con sanciones por atender a personas en situación de irregularidad cuando el actual gobierno valenciano los ha incluido otra vez en el sistema sanitario. Estas personas viven y comparten espacio, territorio, dotaciones, etcc con el resto de la población valenciana, y la falta de atención y seguimiento no sólo pone en peligro a estas personas, si no también al resto de los ciudadan@s.

Que ahora el gobierno central ataque a una norma del Consell y que podía acarrear multas millonarias por parte de la Unión Europea es una burla más a un país, a una comunidad con transferencias en materia de sanidad desde hace ya muchos años.

Desde el movimiento vecinal, movimiento histórico en muchos ámbitos pero sobre todo en los foros participativos contemplados en sanidad, como consejos de salud, vamos a defender la sanidad universal y la incorporación al sistema sanitario público de los inmigrantes como un derecho, como una necesidad vital. Sirva como ejemplo que esta acción se impulsará en los consejos de departamento y el consejo de salud de la Comunidad Valenciana por parte de la Cavecova, y se trasladará a todos los representantes y ciudadanos de esos organismos participativos para tratar de romper esta normativa tan inhumana y poco solidaria, que deseamos que pronto desaparezca, por salud pública y sobre todo por democracia.