Mientras miles de mujeres y hombres salían a las calles de todo el mundo con la idea de exigir una sociedad más igualitaria y libre de violencia machista, en ese mismo instante, pudimos conocer las escalofriantes imágenes de una mujer de 17 años brutalmente agredida por su pareja. No tenemos que quedarnos sólo con la impactante agresividad ejercida por el maltratador, sino que resulta imprescindible analizar la reacción que tiene la víctima ante esa situación. Aunque puede sorprender que la víctima todavía se levanta y parece invocar el perdón de su agresor, estamos ante una reacción de libro, que es consecuencia de la violencia de género, los ciclos de la violencia y la llamada indefensión aprendida.

La teoría de la indefensión aprendida fue formulada por Martin Seligman, y posteriormente aplicada por Leonore Walker, como modelo explicativa por el que las mujeres víctimas de violencia de género permanecen en este tipo de relaciones tóxicas, incluso justificándolas. Estamos ante un proceso que generalmente se prolonga en el tiempo, con el que se consigue anular a la persona, y donde repetidos malos tratos disminuyen la motivación de la mujer a responder, a denunciar, a escaparse de su agresor. La víctima se acostumbra a que, haga lo que haga, no puede cambiar lo que sucede, y por lo tanto, decide no hacer nada y asume la culpa de lo ocurrido.

En este punto, tampoco debemos olvidar que en esta teoría no se encontró ningún rasgo de personalidad proclive a la victimización, lo que determina que cualquier persona puede caer en este proceso, si se le somete a situaciones de alta violencia y dominio. Por eso, hay que seguir insistiendo en la importancia de la denuncia, en la necesidad de ofrecer a la mujer los recursos para que dé el paso y rompa con su maltratador, y también, en la oportunidad de acotar el valor probatorio de la declaración de la víctima en este tipo de delitos, que como hemos visto, puede estar viciada. En un punto de especial vulnerabilidad, el Estado debe reaccionar con contundencia, aunque la víctima no sea consciente de su situación de peligro.