El sabor a tierra del agua procedente de la planta potabilizadora que en noviembre de 2016 provocó la queja de los alcaldes y concejales que integran la comunidad de usuarios está directamente relacionado con el bajo nivel de Tous en esos momentos por los desembalses técnicos relacionados con unas obras de reparación promovidas por la Confederación Hidrográfica del Júcar. Así consta en la respuesta del director general del Agua, Manuel Aldeguer, a la queja elevada por los usuarios de la planta. La contestación aclara por una parte que el sabor a tierra no tiene nada que ver con el nivel de sulfatos en el agua, como apuntaban los alcaldes; señala que el origen se encuentra en la mayor presencia de un tipo de alga y que, en cualquier caso, «no es nociva para la salud del consumidor en ninguna concentración».
Aldeguer detalla que el sabor del agua deriva de la presencia de unas sustancias denominadas sápidas -con sabor- «y más concretamente por el metabolito 2 metil-isoborneol, que son producidas por cianobacterias, algas, actinomicetos y hongos». La misiva que el director general dirigió en diciembre a la presidenta de la comunidad de usuarios y alcaldesa de Favara, Oro Azorín, señala en cuanto a las posibles causas que se observa una relación entre la presencia de estas sustancias sápidas y el nivel bajo del agua embalsado en Tous.
«En la fecha coincidente con los desembalses técnicos efectuados por la Confederación Hidrográfica del Júcar se produce un incremento de algas cianofíceas en detrimento de las algas diatomeas, las habituales en el río Júcar y el Canal Júcar-Turia. En el presente episodio se ha efectuado un descenso mayor de lo habitual del nivel del embalse de Tous, así como una duración prolongada en el tiempo, motivado por unas obras de reparación en las instalaciones de Tous promovidas por la CHJ», relata Aldeguer, quien, no obstante, deja claro que de la bibliografía consultada «se deduce» que la presencia de estas sustancias no es nociva para la salud del consumidor en ninguna concentración, pero confiere un olor y un sabor al agua característico a tierra, tierra húmeda, tierra mojada, etc.? que puede originar posible rechazo al usuario».
El director general expone en su misiva que a pesar de que el caudal que suministra la planta potabilizadora cumple con la normativa vigente y así lo confirman los últimos informes emitidos en esas fechas por los técnicos de Salud Pública, la Conselleria de Agricultura, a través de la dirección general del Agua, tiene en fase de estudio «la implantación de las medidas que mejoren la calidad del agua en la Estación Depuradora de Aguas Potables». Aldeguer ofrece esta respuesta a los alcaldes de la Ribera tras recabar los informes oportunos de la empresa que explota la planta y de la dirección técnica sobre las circunstancias que han podido influir en el cambio de las características organolépticas del agua, según hace constar en su respuesta.
