La educación se ha convertido en una herramienta básica para encauzar el camino hacia un modelo social más responsable con el medio ambiente. Un pilar fundamental para entender que las acciones que realizan las personas hoy tendrán un impacto en el entorno dentro de unos años. Siguiendo esta premisa, el aulario Ausiàs March del Colegio Rural Agrupado (CRA) la Vall Farta, en colaboración con el Ayuntamiento de Beneixida y el AMPA, ha impulsado un programa basado en la formación medioambiental para niños y niñas que van desde los cuatro hasta los doce años.

A través de la plantación de árboles en el centro educativo, se busca fomentar el respeto por la naturaleza, el sentido de comunidad y el compromiso. Más allá de la propia tarea de reproducción del roble valenciano (Quercus faginea), se intenta crear una relación afectiva con los árboles mediante tareas de mantenimiento y observación. Los alumnos son los encargados de cultivar las semillas en el primer ciclo de Primaria y a medida que van avanzando en su etapa formativa, gracias al vínculo creado, llevan a cabo su cuidado y conservación. «Desde el ámbito educativo es muy importante articular medidas que hagan reflexionar y conciencien a los más pequeños sobre la importancia que tiene el medio ambiente. Esta actividad pretende que acompañen el crecimiento de los árboles hasta que tengan que ser trasplantados a los jardines del polideportivo. Ya hay un grupo que ha cumplido esa fase y estamos muy orgullosos de comprobar los resultados», explicó Eva Roig, alcaldesa de Beneixida.

Un programa que arraiga

Paralelamente a esta experiencia, han ido trasladando el proyecto al resto de centros de la Ribera con su exposición en las Trobades de les Escoles en Valencià, consiguiendo que hayan germinado más de 2.000 robles valencianos. Una iniciativa en la que toda persona interesada en participar está obligada a firmar un contrato de compromiso para contribuir a la conservación de esta especie. «Las cifras son la constatación simbólica, pero real, de que hemos conseguido dar un gran paso por la naturaleza con pocos recursos», puntualizó Roig.