El Hubble ha detectado algo parecido a una "chuche" infantil, aunque formada de gas, en nuestra galaxia vecina, la Gran Nube de Magallanes. Formada por las secuelas de la explosión de una supernova que tuvo lugar hace cuatro siglos, este campo de gas se rompió a lo largo de una serie de observaciones entre 2006 y 2010.

La delicada concha, fotografiada por el telescopio espacial Hubble de la NASA y la Agencia Espacial Europea, parece flotar serenamente en las profundidades del espacio, pero en esta aparente calma se esconde una confusión interna. La envoltura gaseosa formada con la onda expansiva y el material eyectado de una supernova rasgó el medio interestelar cercano. Llamada SNR 0509, la burbuja es el remanente visible de una poderosa explosión estelar en la Gran Nube de Magallanes (LMC), una pequeña galaxia a unos 160 000 años luz de la Tierra.

Las ondas que se ven en la superficie de la cáscara pueden estar causada por sutiles variaciones en la densidad del gas interestelar.