Estados Unidos señala que España se mantuvo en 2010 como el principal puerto de entrada de cocaína y uno de los mayores consumidores europeos de esa droga, aunque su uso disminuyó por los programas gubernamentales y la "débil economía".

El Departamento de Estado entregó al Congreso su informe anual "Estrategia Internacional para el Control de Narcóticos" de 2010, que sirve de base para decidir si la cooperación antinarcóticos es suficiente o no, lo que determina posibles sanciones o ayudas por parte de EEUU a otros países.

Estados Unidos, que califica sus relaciones en materia antidroga con España como "excelentes y robustas", añade que "la incautación de alijos en contenedores en la primera mitad de 2010 excedieron a los de todo 2009", en la mayor parte procedentes de Sudamérica.

El consumo de cocaína, afirma, se ha reducido por los "efectivos programas para reducir la demanda y la debilidad de la economía española".

Con respecto a otros países, Estados Unidos lanza un año más, duras críticas contra la lucha y la cooperación antidrogas de Venezuela y Bolivia, mientras que alaba los esfuerzos de países como México y Colombia.

Sobre Venezuela, reitera que la cooperación de Caracas es "inadecuada".

Venezuela suspendió en 2005 la cooperación bilateral, pero EEUU insiste en que sigue preparado para ayudar a ese país a luchar contra el cada vez mayor flujo de drogas que pasa por su territorio.

Washington calcula que unas 250 toneladas de cocaína pasan cada año por territorio venezolano.

EEUU critica a Bolivia por "no alcanzar una reducción neta" de la producción, mantener "controles inadecuados" sobre los mercados legales de coca y "fracasar en el desarrollo de una estrategia consistente" con las convenciones internacionales.

También alerta de la creciente presencia de miembros de organizaciones narcotraficantes de Colombia y México.

El Gobierno de Washington alerta de que Centroamérica está bajo creciente presión de las organizaciones de tráfico de drogas a medida que Colombia y México redoblan sus esfuerzos para luchar contra los narcos.

Eso hizo que Costa Rica, Honduras y Nicaragua fuesen incluidos en septiembre pasado en la lista de principales productores de droga o países de tránsito, en la que ya se estaban Panamá y Guatemala.

En cuanto a los países andinos, EEUU considera que Perú y Bolivia se han consolidado como segundo y tercer mayores productores de cocaína, y que los esfuerzos de ambos países son insuficientes, mientras que valoró los de Ecuador y Colombia.

El Departamento de Estado advierte a Bogotá de que las bandas criminales "se han convertido en un reto policial mayúsculo" en ese país.

EEUU destaca, por otra parte, que México ha conseguido logros "significativos" pero afronta "un reto enorme" para revertir la violencia y fortalecer las instituciones, mientras los narcotraficantes continúan expandiendo su presencia.

Por otra parte, EEUU alaba los logros de Afganistán en su lucha antidrogas, pero critica las "dificultades" del Gobierno de Hamid Karzai en perseguir la corrupción política de altos cargos vinculada al opio.

El documento destaca que el 90% del opio ilegal que se obtiene en el mundo procede de Afganistán, que además se ha convertido en el mayor productor de hachís.

EEUU admite que Afganistán obtuvo "admirables logros" en su lucha contra las drogas en 2010, pero insta al Gobierno de Karzai a que intensifique estos esfuerzos, en especial en la persecución de aquellos políticos corruptos que apoyan y se benefician del cultivo de opio y de su comercio.