Un hombre de 26 años y con antecedentes únicamente por conducir ebrio mató el jueves a puñaladas a una empleada de 58 años de una panadería de Barcelona mientras atracaba el establecimiento. Se trata de la tercera víctima mortal en dos semanas en Cataluña durante sendos asaltos, tras los atracos con fallecido en un banco de Cambrils y una joyería de Barcelona.
El último asalto mortal se produjo sobre las 21.23 horas del jueves en el número 536 de la calle Muntaner, en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi, y el atracador huyó sin llevarse ningún botín.
Ángel R. S. fue apresado por otros dos empleados -un español y un magrebí-, que salieron tras él y le dieron alcance a la carrera. Luego lo retuvieron hasta la llegada de una patrulla policial que pasaba casualmente por el lugar.
Vecinos y amigos de la dependienta muerta han asegurado que "ella no se resistió", y han afirmado que fueron los trabajadores del local quienes salieron detrás del presunto autor y lo retuvieron hasta la llegada de la policía.
Por otro lado, la empresa panificadora a la que pertenecía la dependienta asesinada ha exigido que se abra un expediente de investigación interno por la falta de celeridad de los servicios médicos que recibió la víctima, y pedir responsabilidades en caso de que fuera necesario.
La ambulancia tardó diez minutos en llegar. Los médicos tardaron después una hora en estabilizar a la víctima para poder llevarla al hospital, donde finalmente falleció.
