La Policía Local de Valencia ha detenido a un conductor por circular ebrio porque se quedó dormido en un semáforo en rojo. Varios conductores se tuvieron que bajar de sus vehículos y empujar el coche del acusado a un lugar donde no estorbara a la circulación. El fiscal pide que el arrestado sea condenado a ocho meses de prisión por un delito contra la seguridad del tráfico. El imputado es multirreincidente.

Los hechos presuntamente ocurrieron sobre las 9.30 horas del 31 de enero en el cruce de las calles Pedro Cabanes con Camí de Moncada de la ciudad de Valencia. El acusado, según la Fiscalía, había ingerido gran cantidad de bebidas alcohólicas y circulaba «de manera torpe y descuidada» hasta que se durmió en el semáforo en rojo. Los otros conductores que no podían pasar se bajaron de sus coches, desplazaron el vehículo del acusado a un lateral y avisaron a la Policía Local.

Los agentes comprobaron que el acusado «mostraba claros síntomas de embriaguez como fuerte olor a alcohol» y lo sometieron a la prueba de alcoholemia. El acusado dio 0,95 y 0,75 miligramos de alcohol por litro de aire aspirado en el test.

El conductor pasó ayer a disposición judicial y se negó a prestar declaración. El fiscal pide que cumpla seis meses de cárcel y que le retiren el carné de conducir durante cuatro años.