Laura del Hoyo, una de las dos jóvenes que habían desaparecido el jueves de la semana pasada y que aparecieron muertas ayer por la tarde en Cuenca, vivió durante cerca de año y medio en la localidad valenciana de Xirivella, donde trabajó en un comercio de cosmética y como bailarina.

Así lo han asegurado a EFE fuentes del Ayuntamiento de este municipio valenciano, que ha convocado para mañana a las doce un minuto de silencio en rechazo por la muerte de las dos mujeres.

Según las fuentes, Laura del Hoyo no llegó a estar empadronada en el municipio, de cerca de 30.000 habitantes y situado a unos seis kilómetros de la capital valenciana, aunque sí vivió en él por motivos laborales hasta el pasado día 1, cuando regresó a Cuenca con su familia.

Tabajó con el cantante Ángel Merino

El cantante Ángel Merino, para el que durante varias actuaciones trabajó como bailarina Laura del Hoyo, ha asegurado hoy a EFE que esta era "muy alegre" y "no tenía enemigos". "Ha sido un golpe muy duro", ha señalado muy emocionado Merino, responsable de la empresa Espectáculos Merino radicada en Xirivella.

Según ha explicado Ángel Merino, aunque el verdadero trabajo de Laura del Hoyo era el de dependienta en una perfumería, participó en algunas ocasiones como bailarina de alguna de sus actuaciones como cantante.

Ha recordado que la conoció cuando iba a alquilarle un piso y al ver que era simpática y tenía aptitudes para el baile decidió ofrecerle participar en alguno de sus conciertos. También le ofreció hacerlo este verano, ha señalado Merino, aunque rechazó el ofrecimiento porque le dijo que iba a irse a Cuenca.

"Era muy alegre, muy simpática y muy responsable, no tenía enemigos", ha señalado a EFE Ángel Merino, quien ha recordado que tuvo una relación "muy buena con la joven", de la que ha dicho que no era "una persona que se mereciera lo que le ha pasado". "Hizo amistades y era conocida en la población", han indicado las fuentes a EFE, según las cuales estuvo trabajando en una tienda de productos de cosmética y con una empresa de espectáculos, ya que actuaba como bailarina.

Los cadáveres de Marina Okarynska y Laura del Hoyo fueron hallados ayer en el nacimiento del río Huécar (Cuenca) por un ciclista.

Se encontraban boca abajo y presentaban signos de quemaduras y restos de cal, lo que hace pensar que el autor o autores de sus muertes podrían haber intentado quemarlas.