Los agentes acudieron a una vivienda en la noche del martes que linda con la plaza Blasco Ibáñez tras el aviso de un vecino que decía haber visto a unas personas metiéndose en la casa tras trepar un muro.

Los agentes acudieron a la casa, y vieron que la luz estaba encendida. Mientras uno llamaba a la vivienda otro vigilaba en la parte trasera de la casa por si salían. Los ladrones al verse sorprendidos huyeron por la parte posterior, donde esperaba el policía. Tras una persecución a pie por el municipio, los agentes lograron interceptar a dos de ellos, mientras que otro logró escapar por la huerta de Alboraia.

Los policías comprobaron posteriormente que la propietaria de la vivienda estaba en la zona de casetas de las fiestas y que los ladrones habían revuelto la casa.