Los bomberos y la Policía Local de Valencia rescataron ayer a dos niños que se había quedado atrapados en dos coche aparcados al sol junto. El primer caso se dio a las 11 de la mañana, junto a un camino cercano a la Ciudad de las Artes y las Ciencias, mientras que el segundo tuvo lugar junto al colegio San Pedro Pascual en la plaza Horticultor Corset de Valencia (paralela a la calle Juan Llorens).

Según informaron los bomberos, en el primer caso la madre estaba fuera del coche y no podía abrir el vehículo por un fallo en el mando a distancia. Al parecer se trataba de turistas que habían alquilado el vehículo para pasar unos días en Valencia. El niño pasó alrededor de 20 minutos en el interior del mismo y al sol.

Por la tarde se volvió a repetir la situación. Según presenció este periódico, una mujer estuvo dando golpes al capó del coche para mantener despierto al pequeño, de 15 meses, hasta la llegada de la policía y los bomberos. Los hechos ocurrieron a las 16.00 horas y la sensación térmica en el exterior era de 30 grados. Los expertos alertan de que la temperatura en el interior de los coches al sol puede alcanzar rápidamente los sesenta grados. Las ventanillas estaban subidas.

La mujer, según las mismas fuentes, alertó a los bomberos que acudieron acompañados de un coche patrulla de la Policía Local de Valencia. En este caso, el vehículo se cerró automáticamente con las llaves dentro, por lo que los bomberos, que llegaron sobre las 16.15 horas, decidieron romper la ventanilla trasera del lado derecho para no lastimar al pequeño.

El menor no perdió en ningún momento la consciencia y no hizo falta alertar a los servicios médicos. A los cinco minutos de salir del coche, se presentaron otros dos familiares del pequeño que comenzaron a abrazarlo tras comprobar que se encontraba en perfecto estado.

Se desconocen las causas por las cuales se llegó a esas situaciones y por qué no estaban los menores acompañados. Sin embargo, fuentes policiales y de bomberos descartaron que se tratara de un caso de abandono, ya que en esas circunstancias se habría interpuesto una denuncia.

Dos horas antes del suceso, la Policía Local de Valencia alertó a través de su cuenta de Twitter de los riesgos de dejar a los niños en coches cerrados al sol. Los agentes recordaron que un pequeño de entre 1 y 5 años puede morir en el plazo de entre 30 y 60 minutos en esta situación.