La Policía Nacional, en colaboración con la Gendarmería francesa, ha desarticulado una banda de ladrones que operaba en gran parte en Alicante y que estaba realizando robos en diversos municipios de la costa mediterránea y de las islas baleares. Su objetivo era asaltar viviendas de turistas y para ello no escatimaban en realizar minuciosos preparativos, como alojarse en zonas residenciales, para tras pasar inadvertidos entre los vecinos, controlar a aquellos que se iban temporalmente de sus viviendas para poder asaltarlas.
El botín de los ladrones era luego enviado a Argelia, de donde es originaria gran parte de los detenidos. Cabe recordar que Alicante y el país africano tienen conexión directa a través del ferri que conecta los puertos de Orán y Argel.
Las investigaciones policiales comenzaron hace varios meses, en junio, cuando las fuerzas de seguridad tuvieron conocimiento de que una organización se dedicaba a robar en viviendas de las zonas turísticas del litoral mediterráneo, si bien las fuentes policiales no confirmaron las ciudades en las cuales actuaron. Eso sí, señalaron que la organización habría robado a ciudadanos en casi todas las comunidades autónomas, y de países como Francia, Argentina, Suiza, Portugal, Holanda y Alemania.
Cerca de 25 robos
La banda se alojaba con documentación falsa en zonas residenciales para vigilar a sus vecinos,y averiguar cuándo se iban de las viviendas. De esta forma cometieron al menos 25 robos con fuerza en los que se hicieron con una gran cantidad de joyas, como anillos, pulseras y collares; además de dinero en efectivo, teléfonos móviles y tabletas electrónicas que, según averiguaron los policías, eran después trasladados a Argelia.
Los investigadores lograron identificar y localizar a los componentes de la trama y detuvieron a cinco de ellos en Ibiza y a otros cuatro en Alicante. Asimismo, en las citadas ciudades registraron cuatro viviendas en las que hallaron gran parte de los objetos sustraídos.
Sin embargo, no fue esa el último arresto en la Comunitat Valenciana. Días después se precipitó la detención de un quinto hombre en Alicante, cuando los agentes de la Policía Nacional estaban vigilando al último de los sospechoso y observaron cómo agredía a su pareja. Fuentes de la Policía Nacional explicaron que la mayoría de los objetos robados han sido ya devueltos a sus dueños.
