La Guardia Civil ha desmantelado durante los dos últimos años un total de 17 grupos de grafiteros acusados de provocar daños por valor de más de dos millones de euros pintando trenes en numerosas provincias españolas. Dichas bandas actuaban principalmente en la Comunitat Valenciana, donde los jóvenes llegaron a colocar barricadas con hierros y objetos contundentes en las vías , en localidades como Moncada, Picassent o Massarrojos, para así parar los trenes y poder hacer grafitis en ambos lados de los vagones.

La «Operación Vagón», en la que la Guardia Civil lleva trabajando desde enero de 2014, se ha saldado con la detención de 59 personas, cuatro de ellas menores, con edades comprendidas entre los 16 y los 33 años. Los detenidos son de nacionalidades española, portuguesa, brasileña e italiana y están acusados de los delitos de daños, desórdenes públicos y pertenencia a organización criminal ilícita.

Esta operación ha permitido esclarecer 400 hechos ilícitos realizados en las provincias de Valencia, Alicante, Castelló, Barcelona, Tarragona, Cuenca, Madrid, Albacete, Soria y Murcia.

Las investigaciones se iniciaron a comienzos de 2014 cuando la Guardia Civil de Valencia investigaba a los autores de una serie de grafitis en trenes de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV). Entonces ya se descubrió que había varios grupos que competían entre ellos pintando los trenes. Incluso subían los vídeos de sus actos vandálicos a Internet para demostrar sus «logros».