La Policía Nacional apresó en la madrugada de ayer a dos carteristas que se habían colado en la disco móvil de la Falla Almirante Cadarso-Conde de Altea con la intención de robar a las personas que bailaban en la discomóvil. Uno de ellos tenía pendiente una orden de un juez de lo Penal de Bilbao, que lo buscaba para ser ingresado en prisión y cumplir una condena por robos anteriores.

Los dos presuntos ladrones, ambos argelinos y de 24 y 27 años de edad, fueron detectados por los agentes de paisano que vigilan las 24 horas del día los puntos de máxima afluencia de personas en Fallas para tratar de minimizar el impacto de los grupos de carteristas que cada año llegan a Valencia para hacer su particular agosto en marzo.

Los policías vieron que uno de ellos se chocaba constantemente contra las personas que bailaban, y que el otro cubría su acción con el cuerpo, para después intercambiarse algo con discreción, que uno de ellos almacenaba junto a la barra donde se servían las bebidas.

Los agentes decidieron intervenir y comprobaron que lo que tiraban eran carteras recién robadas y vacías ya de dinero. La rápida intervención de los policías permitió la detención de ambos y la devolución inmediata a sus propietarios de las carteras y los 149 euros que contenían.