La Guardia Civil está investigando el asesinato a golpes de un vecino de Utiel de 51 años, Marcos H. P., cuyo cuerpo sin vida fue encontrado en la madrugada de ayer en su domicilio, en la calle La Utielana del citado municipio. Agentes del grupo de Homicidios de la Comandancia de València se desplazaron a Utiel nada más confirmarse la muerte violenta y ayer comenzaron a tomar declaración a personas de su entorno.

El cuerpo sin vida de Marcos fue encontrado al filo de la medianoche del lunes en su casa por una amiga suya que acudió al domicilio, alertada porque no respondía a sus llamadas y no sabía nada de él desde el día anterior. La mujer halló el cuerpo en el suelo, con manchas de sangre a su alrededor y la vivienda estaba muy revuelta.

De hecho, los investigadores barajan como una de las principales hipótesis que Marcos haya sido víctima de un robo, aunque está por determinar qué buscaban exactamente los autores del homicidio.

La mujer llamó al 112,que envió al lugar a agentes de la Guardia Civil del puesto de Utiel y de la Policía Local del municipio. Nada más confirmarse que se trataba de una muerte violenta, fueron alertados los especialistas del grupo de Homicidios y del laboratorio de criminalística, que se desplazaron a la vivienda, ubicada en el número 30 de la citada calle de Utiel.

El cuerpo fue levantado por orden de la jueza de guardia de Requena al filo de las tres de la madrugada y trasladado al Instituto de Medicina Legal de València, donde ayer se le practicó la autopsia. Los forenses confirmaron que Marcos H. P. murió tras recibir numerosos golpes, principalmente en la cabeza, con un objeto contundente y, en principio, sin filo.

La inspección ocular de la vivienda se interrumpió de madrugada y se reanudó ayer por la mañana. Mientras los agentes del laboratorio de criminalística buscaban evidencias en la casa que puedan conducir a la detención de los autores del crimen, los de Homicidios tomaban declaración en el cuartel de Utiel a las últimas personas que estuvieron con Marcos, así como a la mujer que encontró el cuerpo y que dio la voz de alarma en la madrugada del lunes.