Aurelio Martínez, escasa anda la cantera del PSPV, ya lo dijo claro hace tan sólo nueve meses: «De las ofertas que se presentaron, en lo deportivo, ésta (la de Meriton) era la mejor con diferencia para el club». Por tanto, ellos ya sabían que no se iban a fichar a las estrellas futbolísticas del momento, que se iban a comprar jugadores jóvenes con una gran proyección a precio de cracks, que el director deportivo sería la dupla formada por Lim y Mendes, que Nuno sería la única voz «terrenal» autorizada en temas deportivos y que la escuela de Paterna la iba a dirigir el que fuera en una etapa el responsable de La Masía. Todo esto, claro está, prescindiendo de los valencianistas Rufete y Ayala. Lo debieron saber y les pareció que era el mejor modelo de gestión para el Valencia. O, ¿no lo sabían?
A todo esto, la temporada ya ha empezado y en tan sólo dos jornadas de Liga hemos asistido al primer revolcón que Mestalla le propinó, en teoría, al entrenador. Lo que está claro es que la afición valencianista no sólo quiso reprobar una decisión técnica. Probablemente, después de tantos meses creándoles una niebla artificial y bastante espesa, el personal empieza a ver la pista de aterrizaje. Hay mucha diferencia entre lo que les prometieron y lo que están viendo. El primer aviso ya está dado.
Pero además, el ambiente valencianista anda preguntándose algunos asuntos que hasta el momento no tienen una respuesta oficial. Es el club de las suposiciones permanentes. Muchas preguntas y pocas respuestas oficiales. Es otro modelo. Si hablas te comprometes.
¿Tiene pensado Peter Lim hacer una ampliación de capital? ¿Se ha superado el «fair play financiero» esta temporada? Cuestiones que, de momento, no estiman oportuno aclarar. La afición quiere saber qué tipo de dueño tiene el Valencia. A la vez también esperan algunas respuestas sobre cuestiones deportivas. ¿Será capaz el entrenador de hacer jugar mejor al equipo? ¿Se ha confeccionado una plantilla capaz de afrontar una temporada de rotaciones? ¿Podrán jugar algún día Alcácer y Negredo juntos? ¿Por qué no ha renovado todavía Feghouli? Sinceramente, creo que Nuno está soportando demasiada presión social. Se ha convertido en el único ejecutivo con presencia y accesibilidad y que al menos ofrece respuestas.
Por cierto, ¿cómo va la venta de packs de entradas para la Champions? Al final, la niebla desaparecerá. No subestimen tanto.
