El jueves ante la UD Las Palmas el Valencia no fue excelso. Lejos del fútbol estético el equipo fue práctico y selló el pase a semifinales. En el ambiente de celebración por estar entre los cuatro mejores de la competición copera, la gran noticia que destacaban tanto jugadores como técnico era haber dejado la portería a cero. El grupo necesitaba un choque en el que el cancerbero no tuviera que recoger el balón de la red, pero especialmente era esa línea defensiva la que pedía a gritos acabar con un marcador así.
Curiosamente desde el inicio de esa eliminatoria, Gary Neville no ha cambiado ni la defensa, ni la portería. El técnico inglés ha declarado en más de una ocasión que su intención es hacer el equipo desde esa parcela y parece haber encontrado en Barragán, Mustafi, Abdennour y Gayà a los líderes de la zaga. Ahora, el objetivo de los cuatro debe ser impedir que el Sporting de Gijón marque. De hecho, el Valencia no deja la meta en Liga desde el pasado 31 de octubre en el partido ante el Levante en Mestalla.
En ese grupo hay un hombre que ha conseguido mostrar una pequeña parte del nivel que ofreció la temporada pasada. Abdennour en Mónaco fue líder de la defensa y eso provocó que el Valencia fijara sus ojos en él. Sin embargo, desde que aterrizó en Manises, el tunecino ha sido una sombra de lo que fue, aunque desde aquel castigo en el que no estuvo en la convocatoria contra el Rayo ha sido otro. En el choque de ida frente a la UD Las Palmas el central comenzó su metamorfosis, en la segunda parte ante el Deportivo estuvo a buen nivel y en la vuelta de Copa consiguió que el rival no tuviera demasiadas ocasiones. Quién sabe si estos tres choques son el inicio de otro Aymen Abdennour.
Junto al tunecino, Mustafi es el hombre indiscutible en el centro de la zaga. El internacional por Alemania es el líder de la defensa a pesar de no estar al nivel del curso pasado. Barragán y Gayá completan una línea de cuatro que parece asentarse. El lateral diestro, estuvo ante la UD Las Palmas, en un ejercicio de compromiso con dolor en el tabique nasal y con una molesta máscara. Mientras, el de Pedreguer mostró en el estadio Gran Canaria algunos de sus mejores capítulos esta temporada. Al canterano se le vio fresco y demostró que físicamente vuelve a estar al máximo para rendir en defensa e incorporarse en esos ataques por la banda izquierda.
Solución en el centro del campo
La titularidad de Enzo Pérez en la vuelta de cuartos de final de Copa del Rey supuso un punto de inflexión en la imagen del equipo. El primer periodo del partido ofreció momentos de mejora con respecto a los últimos partidos y una parte del mérito reside en la actuación del centrocampista argentino, quien además protagonizó el robo en el tanto de Rodrigo a pase de André Gomes.
El próximo paso de Enzo debe ser mantenerse y tratar de aguantar hasta el final de la temporada sin ninguna lesión, su gran Talón de Aquiles. El centrocampista necesita continuidad y Neville a un jugador que puede suponer el equilibrio en todas las líneas.
