La Generalitat trata de convencer a la Comisión Europea (CE) de que libere al Valencia de pagar la multa de 23,3 millones al menos mientras la propia CE estudia la solicitud del club de suspender cautelarmente la sanción, lo que se prolongará al menos tres semanas. Eso desahogaría al Valencia, pues el ultimátum para pagar es el próximo domingo día 6.
El Consell, además, ha consultado con los abogados de la Generalitat y con los juristas de la CE si se puede paralizar el pago en metálico de la sanción hasta que se resuelva el recurso del club ante la Corte Europea, cuyo fallo está previsto para dentro de dos años. Para esquivar el desembolso, el Valencia, en su solicitud de suspensión cautelar, ha presentado garantías (los derechos de televisión, por ejemplo) que puedan cubrir la multa en caso de que el recurso fuera finalmente desestimado.
La Generalitat califica de sensatas las peticiones del Valencia. La presidenta del club, Layhoon Chan, cuenta con la complicidad del jefe del Consell, el socialista Ximo Puig. La CE exige a la sociedad de Mestalla el desembolso de 23,3 millones de sanción por un aval supuestamente irregular de la Generalitat a la Fundación del club en 2009 por un préstamo de 75 millones concedido por Bancaja.
El consejero ejecutivo del Valencia, Anil Murthy, le pide al Consell que, a través de los abogados de la Generalitat, envíe ahora un informe jurídico favorable a la suspensión cautelar de la multa. «La Generalitat no tiene porqué seguir ciegamente a la Unión Europea», enfatizó el consejero ejecutivo que será confirmado hoy en la junta de accionistas del club de Mestalla. Ese informe, en teoría, debería ser trasladado a los abogados del Estado, pues la sanción de la Unión Europea es al Reino de España.
«Sin obligación de reclamar»
El Valencia también reclama a la Generalitat que evite denunciar la morosidad valencianista ante la UE si el club decide, como parece, no pagar antes del domingo. «No está clara la responsabilidad de la Administración. No tiene obligación de reclamar la sanción», añadió el consejero. Según Murthy, la legislación española permite un margen de maniobra a la Generalitat para no exigir el cobro mientras haya una petición de suspensión cautelar, siempre que el club ofrezca garantías que avalen el posible desembolso posterior de la multa.
«El club no tiene 24 millones, ni los tendrá dentro de tres semanas», insistió Murthy, para quien sería «un desastre total» el hecho de que finalmente la CE rechazara todas sus propuestas.
El Elche y el Hércules, de uñas
Manuel Illueca, presidente del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), es la persona encargada por la Generalitat para gestionar esta colaboración con el Valencia. Los técnicos de la Generalitat quieren tener la seguridad jurídica en cualquiera de los pasos que puedan dar. Además está la reacción de los otros dos clubes valencianos sancionados, el Elche y el Hércules.
Al club icilitano, la CE le impuso una sanción de 4,1 millones, unidos a los 18 del préstamo objeto de la multa que todavía no ha pagado. El Elche también ha solicitado la suspensión cautelar. Al Hércules, Bruselas lo sancionó con 6,8 millones, que se añaden a los 14 impagados por el préstamo.
El Valencia responde que no tiene nada quever su caso con los de los conjuntos alicantinos. El club de Mestalla ya abonó hace año y medio los 75 millones del préstamos a su Fundación más 25 millones en intereses. «Soy optimista», concluyó Murthy.
