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Decenas de personas se concentraron ayer frente al solar del desparecido teatro Princesa para participar en una consulta popular sobre el uso que se le debe dar a este terreno de titularidad privada. Asimismo, los organizadores pretendían realizar una ocupación del citado espacio como acto simbólico, que debido al cierre de su acceso no se pudo llevar a cabo. Esta iniciativa estaba organizada por vecinos y varios colectivos de Ciutat Vella como Endavant (Organització Socialista d'Alliberament Nacional), Ca Revolta y la agrupación de arquitectos Sostre.

Los vecinos debían opinar si estaban de acuerdo con que el solar se destine a instalaciones de uso público o no; si deberían estar gestionadas por los vecinos de manera autónoma, así como qué tipo de equipamientos deberían construirse. También se preguntaba a los participantes si creían que el ayuntamiento va a tener en cuenta el resultado de la consulta.

Asimismo, se dispusieron dos carteles en los que se explicaba la historia del edificio que fue derribado tras un incendio ocurrido en febrero, además de datos técnicos del solar y su situación en los planes de urbanismo públicos. Acompañados con la música de una "batukada" varios participantes se sentaron en la parte superior del muro como alternativa a la ocupación del solar que se había previsto.

Según aseguró Josep Villarroya, de Endavant, durante los últimos días se podía acceder por la puerta, que estaba abierta, o superando el muro que por uno de sus lados era muy bajo. Villarroya explicaba que el viernes se había acabado de levantar el muro y ayer la puerta estaba cerrada con un candado.

"Estamos haciendo lo que debería llevar a cabo el ayuntamiento", señalaba Villarroya. "Queremos crear un debate en la calle y no estar de brazos cruzados a ver qué hace el ayuntamiento", apuntó. Así, tras el periodo de votaciones que finalizará el día 14 de noviembre (aunque puede prolongarse si es necesario) "probablemente comunicaremos al Ayuntamiento los resultados, y pediremos una entrevista con las instituciones para exigir que los tengan en cuenta y para conocer sus intenciones", explicó.

Hace 17 años se aprobó el plan urbanístico para Velluters (Pepri), y en 2004 el ayuntamiento decidió que el terreno del Princesa se destinaría a equipamiento cultural público, el suelo del Valencia Cinema se ampliaría ( como equipamiento cultural privado) y se ejecutaría una plaza y aparcamientos subterráneos para los vecinos.

Para ello el ayuntamiento expropiaría los terrenos destinados a equipamientos de carácter público. Desde entonces, el ayuntamiento no ha llegado a un acuerdo con los dueños del terreno, que lo han alquilado a los vendedores del Mercado Central como aparcamiento para las furgonetas del colectivo.