El presidente de la comisión diocesana del Arzobispado y conservador del Santo Cáliz de la Catedral, Jaime Sancho, junto con el vicario de Evangelización del Arzobispado, Javier Llopis, presentaron ayer los actos de conmemoración del año Santo Jubilar del Santo Cáliz, que arranca hoy con una misa en la Catedral oficiada por el arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, en la que la reliquia se sacará de su hornacina de cristal blindado para llevarla al altar mayor y presidir la ceremonia.

Una ruta urbana que recorre los principales hitos del santo cáliz, que arrancará el próximo mes de noviembre con varios grupos de escolares, y un póster que refleja el recorrido que hizo la reliquia desde Jerusalén hasta Valencia son algunas de las actividades programadas por el cabildo que además ha imprimido credenciales similares a las del Camino de Santiago para los peregrinos de la ruta del Santo Cáliz. El arzobispado informó ayer de que a la catedral ya ha llegado un grupo de peregrinos valencianos que ha realizado la ruta del grial entre Jaca y Valencia que ha podido acuñar sus credenciales.

El Arzobispado hizo pública además ayer la carta que Antonio Cañizares ha dirigido a toda la Diócesis para invitarles a participar en el año santo jubilar. Valencia se incorporó el año pasado al reducido club de ciudades con año jubilar «in perpetuum». En el mundo sólo hay seis ciudades que lo tienen y cinco son españolas. Se trata de Santiago de Compostela, Camaleño (Cantabria), Urda (Toledo), Caravaca de la Cruz (Murcia) y, ahora, Valencia. Aparte, y por motivos obvios como capital del catolicismo y cuna del cristianismo, se celebra año jubilar en Roma y Jerusalén.

La concesión de un año santo jubilar, un periodo de gracia en el que la Iglesia otorga indulgencias, es una prerrogativa exclusiva del Vaticano que se concede excepcionalmente y que depende del cumplimiento de una serie de requisitos, entre ellos, acreditar que existe una fuerte tradición y que se mantendrá en el tiempo. Valencia realizará un año jubilar cada lustro.

El ayuntamiento confía en que el reconocimiento sirva para atraer turistas y potenciar el turismo religioso.